Nuevo estudio le atribuye a este fármaco la capacidad de prevenir distintos tipos de cáncer

Vale para casi todo, por no decir que para todo.

La aspirina, el fármaco con mayor éxito de la historia, además de ser analgésico, antiinflamatorio y antitérmico, ayuda según las investigaciones a prevenir el infarto y el ictus, reduce la mortalidad por enfermedad cardiovascular, reduce el riesgo de depresión en personas mayores, combate la artritis y la fiebre reumática, previene la formación de coágulos y, además, se recomienda en pacientes con retinopatía. Y la lista se amplía gracias a su papel beneficioso en el cáncer.