El cáncer de pulmón se genera al momento en que se empiezan a multiplicar células malignas en este órgano de manera exagerada. Este es una de las formas más agresivas de esta enfermedad. Incluso causa más muerte que el de mama, colon y próstata.
Sin embargo, hay síntomas que no están relacionados con la respiración y que por lo tanto no tendemos a relacionar. Algunos de ellos son el dolor de manos, cansancio extremo y fiebre.
Para ello te traemos ocho síntomas que jamás debes pasar por alto ya que comprometes tu salud de una manera significativa.
1. Respiración forzada.
En este sentido el respirar no debe ser forzado, aunque las dificultades para respirar no deben ser síntomas de una enfermedad grave, pero si para aquellos que están desarrollando un cáncer de pulmón.
2. Silbido en el pecho.
Los silbidos en el pecho son comunes en personas que sufren de asma y en resfriados comunes, pero si surge repentinamente, debes estar muy atento podría ser cáncer de pulmón.
3. Fatiga.
El cansancio y la fatiga es muy común en los pacientes con cáncer, pero sobre todo en el sistema respiratorio.
4. Tos persistente
La tos es una reacción inmunitaria ante el ataque de algunos virus y bacterias que proliferan en el sistema respiratorio. Por lo general desaparece después de una o dos semanas, aunque algunas condiciones pueden hacer que permanezca por más tiempo.
Los fumadores suelen presentarla con más frecuencia, dado que las toxinas del cigarrillo se van quedando retenidas en los pulmones.
5. Dolor en el pecho
Entre los síntomas iniciales del cáncer de pulmón se incluye una sensación de dolor en el pecho que suele incrementar cuando se realiza algún esfuerzo físico, al toser y al reír.
Algunas veces se extiende hacia los hombros y la zona lumbar y, por lo general, se manifiesta de repente, sin una razón aparente. Cuando el dolor es más intenso e incontrolable, hay una alta probabilidad de que las células cancerosas se hayan extendido hacia los huesos cercanos.
6. Dolor en las manos y los dedos
La sensación de dolor en las manos y los dedos es una de las primeras señales de advertencia de este tipo de cáncer y, a su vez, una de las más ignoradas. Muchos no encuentran una relación entre esta dolencia y las anormalidades del sistema respiratorio, ya que están muy alejados.
No obstante, algunas veces aparece como señal de alerta de tumores en los conductos respiratorios, dado que su presencia dificulta la circulación y oxigenación. Unas palmas de las manos con piel engrosada y blancuzca deben ser evaluadas por el médico.
7. Fiebre
La fiebre en los pacientes con cáncer de pulmón suele producirse cuando pasamos por algún episodio infeccioso de cualquier tipo (hongos, bacterias, virus, protozoos, etc) como consecuencia del debilitamiento del sistema inmune.
8. Flema con sangre
La expectoración con sangre nunca se debe ignorar, incluso si solo son unas pequeñas manchas rojizas en las flemas. Su presencia puede indicar cáncer u otras patologías respiratorias graves.
reseña Mejor con Salud