Según una nueva investigación dirigida por Harvard T.H Chan School of Public Health, estudiantes que vivían en habitaciones sin aire acondicionado durante una ola de calor tuvieron peores resultados en una serie de pruebas cognitivas en comparación con los estudiantes que vivían en habitaicones con aire acondicionado.
El estudio de campo, el primero en demostrar los efectos cognitivos perjudiciales de las temperaturas interiores durante una ola de calor en un grupo de individuos jóvenes y sanos, destaca la necesidad de soluciones de diseño sostenible para mitigar los impactos del calor extremo en la salud.
Rendimiento cognitivo
Según explica José Guillermo Cedeño-Laurent, investigador de Harvard Chan School y autor principal del estudio:
La mayor parte de la investigación sobre los efectos del calor sobre la salud se ha realizado en poblaciones vulnerables, como las personas mayores, creando la percepción de que la población en general no está en riesgo por las olas de calor.
Para llevar a cabo este estudio, los investigadores rastrearon a 44 estudiantes adolescentes y de 20 años que vivían en habitaciones. Veinticuatro de los estudiantes vivían en edificios adyacentes de seis pisos que se construyeron a principios de la década de 1990 y tenían aire acondicionado central. Los 20 estudiantes restantes vivían en edificios de poca altura construidos entre 1930 y 1950 que no tenían aire acondicionado.
Los investigadores equiparon la habitación de cada alumno con un dispositivo que midió la temperatura, los niveles de dióxido de carbono, la humedad y los niveles de ruido, y rastrearon su actividad física y patrones de sueño con dispositivos portátiles.
Los resultados mostraron que, durante una ola de calor, los estudiantes en los edificios sin aire acondicionado obtuvieron peores resultados en las pruebas que los estudiantes en los dormitorios con aire acondicionado y experimentaron disminuciones en cinco medidas de función cognitiva, incluidos los tiempos de reacción y la memoria de trabajo.
Combinados los datos, se evidencia que los estudiantes en las habitaciones con aire acondicionado no solo fueron más rápidos en sus respuestas, sino también más precisos.
El calor extremo puede tener graves consecuencias para la salud pública y es la principal causa de muerte de todos los fenómenos meteorológicos en Estados Unidos.
Fuente: xatakaciencia