Con su sola mención, a más de uno le entra miedo: grasas.
Pero, como casi todo en esta vida, hay buenas y malas. Sí, querido lector, hay grasas saludables. Para conocer todos los detalles sobre ellas, hemos hablado con Ángela Quintas, química experta en nutrición clínica, que muy amablemente nos ha aclarado todas nuestras dudas sobre las grasas.
¿Qué son las grasas?
Las grasas son compuestos químicos formados por moléculas de carbono, hidrógeno y oxígeno. Nos aportan 9 Kcal por cada gramo que consumimos, frente a los hidratos de carbono y las proteínas que nos aportan 4 kcal por cada gramo.
Las grasas son muy importantes para el funcionamiento de nuestro cuerpo. ¿Por qué?
- Forman parte de la estructura de las membranas de la célula, a éstas se las denomina ácidos grasos estructurales.
- Función de reserva energética
- Función reguladora y hormonal.
- Función transportadora.
- Función térmica.
- Los lípidos son importantes para la absorción de las vitaminas que se conocen como liposolubles, entre las que se encuentran la vitamina D, E, K1, K2 y la vitamina A. Estas vitaminas necesitan de la grasa para ser absorbidas.
Podemos decir que son imprescindibles en nuestra dieta, aunque tendremos que tomarlas con moderación. Por ello tendremos que buscar los que sean más beneficiosos para nuestra salud.
Las grasas se clasifican en grasas saturadas e insaturadas
Grasas saturadas: Formadas por ácidos grasos de cadena larga, sin ningún enlace doble. Se encuentran principalmente en los alimentos de origen animal, aunque también las contienen en algunos de origen vegetal, como los aceites de coco y de palma. Suelen ser sólidas a temperatura ambiente. Las grasas saturadas son las encargadas de elevar el colesterol LDL malo en sangre (aunque no todo el colesterol LDL es malo, solo el que está oxidado).
Grasas insaturadas: Estas grasas poseen enlaces dobles entre sus átomos de carbono. Son líquidas a temperatura ambiente.
Dentro de las grasas insaturadas encontramos:
Grasas monoinsaturadas: Poseen un único enlace doble entre sus carbonos. Dentro de este grupo se encuentra nuestro maravilloso aceite de oliva y otras grasas de origen vegetal como la que se encuentra en las nueces, el aguacate y las almendras. Esta grasa se encarga de reducir los niveles de lipoproteína LDL y eleva los niveles de lipoproteínas HDL.
Grasas poliínsaturadas: son aquellas grasas que presentan más de un doble enlace entre sus átomos de carbono. Se encuentran presentes en alimentos tanto de origen animal como vegetal. Dentro de este grupo se encuentran los ácidos grasos omega 3 y omega 6.
Grasas trans: las más utilizadas por la industria
Las grasas trans son aquellas que se obtienen mediante hidrogenación industrial de los aceites vegetales, lo que convierte las grasas insaturadas en saturados eliminado los dobles enlaces.
Las grasas trans tienen un índice muy alto de aterogenidad mayor que el de las grasas saturadas. Las grasas trans las podemos encontrar en ciertas margarinas, algunos quesos, alimentos ultraprocesados, etc.
Objetivo: reducir su consumo de las malas, y favorecer las grasas saludables
Podemos resumir que debemos reducir el consumo de grasas saturadas, reducir al máximo las grasas trans y favorecer el consumo de grasas insaturadas. Esta no es una tarea fácil cuando se trata de ir a hacer la compra y nos perdemos en esos largos pasillos llenos de productos.
Tenemos que saber leer muy bien las etiquetas para conocer qué tipo de grasas encontramos en los productos del supermercado.