Conoce los inocentes hábitos que causan desequilibrios hormonales

Los desequilibrios hormonales pueden traer consigo trastornos que afectan la calidad de vida. Se debe al mal funcionamiento de una o más hormonas del organismo.

Las hormonas son las encargadas de regular la mayoría de funciones de los sistemas principales.

Se trata de unos transmisores químicos segregados por las glándulas endocrinas cuya actividad estimula el desarrollo de las células y algunos procesos cognitivos.

Incluso, participan de forma directa en el metabolismo, el crecimiento y las funciones sexuales. Por lo tanto, mantenerlas en equilibrio es esencial para el bienestar.

El problema es que tienden a presentar algunas alteraciones, dado que algunos factores interrumpen su producción o actividades.

Como consecuencia, se desencadenan reacciones negativas en el cuerpo y, al no controlarse, pueden originarse muchas enfermedades.

Sin embargo, algunos hábitos cotidianos y aparentemente inocentes están relacionados con el riesgo de sufrir este tipo de desequilibrios hormonales.

¡Descúbrelos!

7 hábitos que causan desequilibrios hormonales

1. Dormir mal

Tener algún tipo de trastorno de sueño o dormir menos de las horas adecuadas incrementa de forma considerable el riesgo de problemas hormonales.

Además, está comprobado que hay una estrecha relación entre el ciclo de sueño y la secreción de algunas hormonas importantes, en especial en las mujeres.

Estos desequilibrios hormonales pueden afectar el estado de ánimo, los niveles de azúcar en la sangre y el peso corporal.

2. Seguir una dieta baja en grasa

Suprimir todas las fuentes de grasa de la dieta es uno de los peores errores que se pueden cometer cuando se busca perder peso.

Si bien es cierto que las grasas aportan una cantidad significativa de calorías, no es correcto pensar que todas le hacen daño al cuerpo.

Las grasas saludables, como los ácidos grasos omega 3, controlan los procesos inflamatorios y facilitan la regulación de hormonas como los estrógenos y la progesterona.

Limitar su consumo aumenta el riesgo de sobrepeso, además de trastornos como los periodos menstruales irregulares y los quistes.

Este tipo de nutrientes se puede obtener de:

  • El pescado azul
  • Los aguacates
  • El aceite de oliva
  • Los frutos secos
  • Las semillas

3. Ser una persona sedentaria

El sedentarismo tiene mucho que ver con los desequilibrios hormonales que afectan tanto a los hombres como las mujeres.

El ejercicio físico estimula la segregación de endorfinas, un tipo de sustancia química liberada en el cerebro para promover la sensación de bienestar y las energías.

También tiene mucho que ver con el control de las hormonas sexuales, ya que favorece su actividad para mantener el deseo sexual.

4. Abusar de los alimentos procesados

Las carnes procesadas y otros alimentos industriales son deliciosos y pueden darle un toque muy especial a algunas comidas.

El inconveniente es que están llenos de sustancias químicas añadidas que, con el tiempo, ocasionan desbalances hormonales, además de problemas metabólicos y cáncer.

Se relaciona con el incremento de cortisol, una sustancia química vinculada con el estrés, la depresión y la irritabilidad.

5. Usar demasiado desinfectante para manos

Parece exagerado, pero lo cierto es que está comprobado que el uso excesivo de desinfectantes para las manos puede provocar reacciones adversas.

Mientras que muchos piensan que es un hábito saludable de higiene, este altera el balance entre las bacterias saludables y malas, y debilita el sistema inmunitario.

Sus compuestos químicos están relacionados con el riesgo de inflamación y descontrol de la actividad de algunas hormonas.

En particular, compuestos como el triclosán desequilibran los niveles de estrógenos y afectan la función de las hormonas de la tiroides.

6. Practicar actividad física en exceso

Todos los extremos son dañinos y la práctica excesiva de ejercicio físico no es una excepción.

Mientras que el sedentarismo ocasiona estragos en la salud, la actividad física excesiva también acarrea consecuencias negativas.

Pasar demasiadas horas en el gimnasio o realizar actividades de alto impacto físico incrementa los niveles de cortisol.

Además, con los días interfiere en las hormonas que regulan el ciclo menstrual y la fertilidad.

con información de MejorConSalud