Las semillas son alimentos muy nutritivos y con grandes beneficios para el organismo.
Entre estas las pipas o semillas de calabaza son muy populares: te contamos sus propiedades y cómo usarlas en la cocina.
Propiedades de las semillas o pipas de calabaza
Las pipas de calabaza, como otras semillas, son fuente de ácidos grasos insaturados entre los que destaca el ALA o ácido alfa linolénico que es omega 3 de origen vegetal.
Asimismo, es una de las semillas con más proteínas, con más de 20% de este nutriente y resulta una buena fuente de fibra como señala un estudio de Journal of Food Science.
Entre sus micronutrientes destaca el contenido de potasio, magnesio, zinc, fósforo, calcio vegetal, hierro y vitaminas del grupo B así como vitamina E.
Además, las semillas de calabaza son fuente de compuestos fenólicos varios que confieren a las mismas propiedades antioxidantes como ha observado una investigación publicada en 2013. Y estos junto a los ácidos grasos insaturados también brindan un efecto antiinflamatorio tras su consumo.
Beneficios de las semillas de calabaza
Por su riqueza en fibra y en proteínas vegetales, las pipas de calabaza constituyen alimentos muy saciantes y aunque resultan concentrados en grasas y calorías, pueden ser de ayuda al momento de perder peso.
Asimismo, por sus compuestos fenólicos contribuyen a prevenir enfermedades metabólicas como la diabetes o la hipertensión tal como señala un estudio publicado en Journal of Medicinal Food.
Su riqueza en fibra y su poder saciante también se asocian a menor acumulación de grasa visceral y con ello, a menor riesgo de obesidad y enfermedades relacionadas.
Incluso, el omega 3 contenido en las pipas de calabaza ha demostrado tener efecto antiinflamatorio y con ello, contribuir al tratamiento de algunas enfermedades así como reducir el riesgo de otras como por ejemplo, patologías autoinmunes.
Cómo usar pipas de calabaza en la cocina
De la calabaza misma podemos extraer semillas o pipas para tras su lavado, tostarlas y saborizarlas para consumir como tal a modo de snack saludable o bien, incluir en platos diversos.
Por ejemplo, podemos incluirlas en unas galletas, un pan integral, un pesto, un dip o crema para untar o bien, una ensalada a la cual le proporcionarán una textura crujiente.
No recomendamos consumir opciones comerciales fritas y saladas, ya que su contenido nutricional es muy inferior a la que podemos obtener en casa, aprovechando al máximo la calabaza. reseña vitonica