Un equipo de científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha descubierto que una toxina mutante en el veneno del alacrán rojo de la India puede llegar a inhibir el cáncer de mama, piel y próstata.
Se trata de la toxina tamapina que se encuentra en el veneno de esta especie de alacrán. La toxina fue modificada por los científicos mexicanos, quienes evidenciaron que, tras la modificación, esta podía inhibir la migración de algunos tipos de células cancerígenas.
»Al modificar la tamapina se produce el ‘bloqueo’ del movimiento de las células malignas de 60 % a 70 % utilizando una concentración pequeña de la toxina del Mesobuthus tamulus, específicamente para ciertos tipos de cáncer: mama, piel y próstata», señalan los autores del estudio.
Los científicos también encontraron otras toxinas mutantes con el mismo efecto, pero ninguna tan efectiva como la doble mutante tamapina.
Por el momento, los resultados del experimento son alentadores para obtener un fármaco contra estos tres tipos de cáncer en un futuro, pero para ello deben profundizarse aún más los estudios científicos.
«Debemos poner los pies en la tierra porque la obtención de un medicamento tarda mucho tiempo. Creemos que podemos inhibir la metástasis, pero debemos ir con cautela. No queremos generar falsas esperanzas para un futuro inmediato, pero sí estamos tratando de mejorar la vida de las personas con esa enfermedad», concluyeron los científicos, reseña Sputnik