Atención a domicilio y la COVID-19, todo lo que necesitas saber según la OMS

¿Puede recibir atención en su domicilio una persona que ha dado positivo por COVID-19? Esta y otras preguntas son respondidas por la Organización Mundial de la Salud.

Las personas que no tienen síntomas deberían poder quedarse en casa si están adecuadamente aisladas de los demás, pero esto debe confirmarlo un médico.

Puede estudiarse la posibilidad de prestar atención en el domicilio a los pacientes con una enfermedad leve o moderada que tengan menos de 60 años, no fumen, no sean obesos y no tengan otras patologías, como enfermedades cardiovasculares, diabetes mellitus, enfermedades pulmonares crónicas, cáncer, enfermedades renales crónicas o inmunodepresión.

Un trabajador de la salud evaluará los factores de riesgo junto con los síntomas del paciente, los antecedentes médicos y la capacidad de la familia para manejar la atención.

Es necesario que los miembros del hogar limiten los espacios compartidos, practiquen la higiene recomendada y sepan reconocer y responder a los signos de empeoramiento del paciente.

Un trabajador de la salud capacitado debe evaluar si el domicilio en cuestión es adecuado para el aislamiento y la atención de un y si es posible aplicar las debidas medidas de control y prevención de infecciones.

Los trabajadores de la salud capacitados también desempeñan una función importante al apoyar al paciente y a la familia en el hogar, por teléfono, mediante la telemedicina o en los equipos de extensión.

¿Qué se debe hacer para evitar que otras personas en la casa se enfermen si una persona con COVID-19 recibe atención en el domicilio?

Hay una serie de precauciones que pueden evitar el contagio de la COVID-19 a otros miembros del hogar:

  • La persona enferma debe instalarse en una habitación individual; si esto no es posible, el resto de miembros del hogar deben mantener una distancia mínima de un metro.
  • Garantizar una adecuada ventilación en la estancia que ocupa la persona enferma y en los espacios compartidos y abrir las ventanas si es posible y seguro hacerlo.
  • La persona enferma debe llevar puesta una mascarilla médica siempre que sea posible, en particular cuando no esté sola en la habitación y cuando no mantener una distancia mínima de un metro de los demás.
  • No deben permitirse visitas en el domicilio.
  • El número de cuidadores debe estar limitado a una sola persona que no tenga afecciones subyacentes, de ser posible.
  • Los cuidadores y los miembros de la familia deben ponerse una mascarilla médica mientras estén en la misma habitación que la persona enferma. Durante su uso, no deben tocarse la mascarilla ni la cara. Después de salir de la habitación, deben desechar la mascarilla y lavarse las manos.
  • La persona enferma debe tener sus propios platos, tazas, cubiertos para comer, toallas y sábanas. Deben lavarse con agua y jabón y no deben compartirse con otras personas.
  • Las superficies que la persona enferma toca frecuentemente deben limpiarse y desinfectarse al menos una vez al día.
  • Todos los miembros del hogar deben lavarse las manos con agua y jabón con frecuencia, especialmente:
    después de toser o estornudar; antes, durante y después de preparar alimentos; antes de comer; después de ir al baño; antes y después de atender a la persona enferma; siempre que se advierta suciedad visible en las manos.
  • Al toser o estornudar, es necesario cubrirse con la parte interior del codo o con un pañuelo de papel que debe desecharse inmediatamente.
  • Los residuos de la persona enferma deben embalarse en bolsas resistentes y bien cerradas antes de desecharlos.

¿Cuánto tiempo deben permanecer en el domicilio y en aislamiento las personas con COVID-19?

Las personas con COVID-19 que reciben atención en el domicilio deben permanecer en aislamiento hasta que ya no puedan transmitir el virus a otros:

Las personas con síntomas deben permanecer aisladas durante un mínimo de 10 días desde el inicio de los síntomas, más otros 3 días desde su desaparición, es decir, desde que dejaron de tener fiebre y síntomas respiratorios.

Las personas sin síntomas deben permanecer aisladas durante un mínimo de 10 días desde el resultado positivo.

OMS