Ni la oposición tuvo una nueva decepción el 6-D, ni se murió Stan Lee, ni hubo un atentado en el Vaticano, ni el barril de petróleo tuvo un repunte en 2015. Tome asiento para una antología del desastre, pero tenga piedad y recuerde que hasta Steve Harvey merece una nueva oportunidad
Voy a empezar saliéndome por la tangente: Adriana Azzi tampoco pegó casi nada de lo que anunció en enero de 2015. Es cierto que habló de colapso económico, de hambruna, de la mayor devaluación de la historia y de la caída del petróleo, también se refirió a “encargado de la presidencia” (no hubo), “golpe y contragolpe” (no ocurrió), “suspensión de pagos” (no ocurrió, todavía), “cárcel que rodea al gobernador de Miranda” (no ocurrió, aunque sí hubo “controversia tuitera con papá de encarcelado”) y a una presunta transición liderada por hombre de “piel canela, rasgos finos, ha bajado mucho de peso en los últimos años, usa lentes, de 56 a 62 años de edad” (¿¿¿quién ese ese??? La única que recuerdo que ha bajado de peso es La Bicha).
Pero ya. No posterguemos lo inevitable. Las profecías que hice en enero fueron un asco. En este género periodístico, el estándar de éxito aceptado es el mismo que aplica para el beisbol: si conectas de hit en 3 de cada 10 ocasiones en que te paras a batear en el plato, mereces entrar al Salón de la Fama. Ni siquiera cerca de eso. Veamos:
Profecía 1: “Atentado terrorista de cierta espectacularidad en el Vaticano”
NO. Lo hubo en París en noviembre, y luego llegó a generarse hasta una alerta del FBI para evitar viajes al Vaticano, pero la capilla Sixtina y el Papa Francisco permanecen intactos.
Profecía 2: “Pablo Iglesias, efectivamente, se convierte en nuevo presidente del Gobierno de España luego de las elecciones legislativas, sostenido sobre todo en el voto de las grandes ciudades”
NO. Hasta ahora, no. Aunque no está descartada la posibilidad, sobre todo si es necesario repetir las elecciones en el trancadísimo panorama parlamentario español luego del 20-D. Puede considerarse un triunfo moral, porque Iglesias y el partido de ruptura Podemos cerraron la recta final en alza luego de un año de altibajos en la encuestas y a la hora de la chiquita aplastaron a la otra opción emergente de cambio, Ciudadanos, apoyados en los resultados en las grandes ciudades (¡hurra!). Pero no. Podemos igual solo tiene 69 de 350 diputados. Será un factor decisivo en las negociaciones para formar nuevo gobierno, pero hasta ahora las quinielas las siguen encabezando Mariano Rajoy (PP) y Pedro Sánchez (PSOE).
Profecía 3: “Carlos Carrasco y Pablo Sandoval son los venezolanos más destacados en la temporada de Grandes Ligas. Félix Hernández en la Serie Mundial (Dodgers-Marineros)”
NO. El ganador de premio Luis Aparicio al mejor venezolano en las Grandes Ligas fue Miguel Cabrera, seguido en la votación por José Altuve. El debut de Sandoval en Boston puede calificarse perfectamente como catástrofe (tanto como estas profecías), con sus peores números con el bate desde que es regular en las Mayores y hasta una sanción por andar de baboso en redes sociales en pleno juego de los Medias Rojas. Los pitchers Félix Hernández y Carlos Carrasco lanzaron temporadas muy decentes y quedaron en los puestos 7 y 13 de la elección del Cy Young de la Liga Americana, pero no, no, no. Además, la Serie Mundial fue Reales-Mets.
Profecía 4: “El Episodio VII de Star Wars NO será la película más taquillera de las estrenadas en 2015, aunque eso solo lo sabremos bien avanzado 2016. Relativa dificultad para crear una nueva base de fans jóvenes”
NO SE SABE. La profecía no aclara si se refería a la taquilla de Estados Unidos, del mundo o de Venezuela. Internacionalmente, según el Box Office Mojo, hasta ahora la película más taquillera de 2015 es Jurassic World (1.669 millones de dólares) yEpisodio VII va de quinta (1.086 millones), pero a efectos estadísticos, lo que siga sumando la secuela de Star Wars en 2016 debe sumarse al pote. Hasta ahora, sus números son contundentes, y la película de JJ Abrams logró los récords históricos de mejor estreno en Estados Unidos (248 millones) y en todo el planeta (529 millones). Una de las relativas grandes decepciones de 2015, por cierto: Los Vengadores 2, que era la favorita que tenía en mente en enero.
Profecía 5: “Importante sismo afecta al estado de Oregon, en Estados Unidos”
NO. Oregon está al lado de California. Esta era una variante del “inminente sismo devastador en la Falla de San Andrés” que pretendía ser estúpidamente cool, en el lugar donde los Héroes de Portland obtuvieron la clasificación olímpica en 1992. Los grandes terremotos de 2015 ocurrieron en Nepal (7,8 grados) y Chile (8,3), básicamente.
Profecía 6: “El barril de petróleo cierra el año 2015 con cierto repunte, aproximadamente 60 dólares”
NO. Horroroso. Vergonzoso. Asqueroso. Es todo lo contrario. Quítele por lo menos la mitad. Probablemente a principios de año sobredimensioné la potencial amenaza en el Medio Oriente del Estado Islámico, que por supuesto es un peligro, pero tampoco se ha apoderado de toda la Península Arábiga ni nada por el estilo.
Profecía 7: “Fallece personaje emblemático de las historietas de superhéroes (y el cine)”
NO. Obviamente se refería a Stan Lee, que tiene 93 años de edad, pero Stan Lee está vivo (aunque no sé en qué condiciones). Típica predicción facilista y poco creativa que debo evitar en 2016, si es que acaso me dan una segunda oportunidad.
Profecía 8: “Abstención de 45% en elecciones legislativas. Nuevo resultado desfavorable para la oposición”.
NO. Esto es vergonzoso. Parezco Oscar Schemel en el programa de José Vicente Rangel. El resultado del 6-D no fue desfavorable para la oposición. La participación de 74% puede considerarse muy elevada. Posibles argumentos en mi defensa: 1. El escepticismo consuetudinario de todo opositor (ni el más optimista de los encuestólogos pronosticó los 112 diputados); 2. Esta profecía era íntimamente narco-dependiente de la número 6, que no se produjo. 3. Estaba ligando pa’tras. Si me hubiera referido a los votos de William Ojeda, a lo mejor quedaba un poco menos indigno. Por cierto: ojo con el futuro político de Nacho, el de Chino y Nacho.
Profecía 9: “Consecuencias visibles del aumento del nivel de los mares por el calentamiento global”
Esto es discutible. El acuerdo histórico de la Cumbre de París sobre cambio climático se logró, en parte, debido a la preocupación sobre los datos incuestionables acerca del aumento del nivel del mar, y hay naciones insulares que están seriamente amenazadas en este preciso momento, pero todavía no ha ocurrido algo demasiado espectacular, así tipo “paren las rotativas de los periódicos” (de hecho, eso nunca será así, sino un proceso gradual). Miami, teóricamente una de las ciudades en peligro cuando avance el siglo XXI, todavía recibe venezolanos.
10. El Miss Venezuela, el arte abstracto y la música académica, de luto
NO. Aquí es posible intuir entrelíneas nombres como los de Osmel Sousa, Susana Duijm, Carlos Cruz Diez o el Maestro Abreu, pero todos siguen vivos, al menos hasta el 29 de diciembre de 2015. Nuevamente, típica profecía muy genérica y facilista. Pronosticar fallecimientos de personas mayores es aburrido. Yo sé que puedo dar más. Los medios registraron la muerte de una candidata del Miss Venezuela 1973 que vivía en la indigencia, Damarys Ruiz. Pero no, no, no. Hablando de reinados de belleza: ni un pálpito sobre el lanzamiento de Donald Trump o sobre el desastre del Miss Universo. Malo, malo.
ÑAPAS: “Se inicia programa piloto de enseñanza de chino en algunos colegios bolivarianos”; “Se desmiente de manera definitiva la posible ubicación del Arca de la Alianza en Etiopía”; “Mónica Fernández (Televen) obtiene una diputación”; “Diosa Canales se divorcia en mayo”; “Ni Brasil ni Argentina ganan la Copa América”.
NO, NO, NO, NO, SÍ. Creo que hasta los chinos se han olvidado por completo de Venezuela. Lo del Arca de la Alianza en Etiopía fue una estupidez. Mónica Fernández no se lanzó a diputada y sigue conduciendo su reality legal show en Televen. Diosa Canales se mantiene como mujer casada e incluso se desnudó con su esposo ciclista para la revista Playboy. La única esperanza llegó al final de la lista de profecías, gracias al fútbol: Chile ganó la Copa América en la que fue anfitrión, lo que tampoco era una hazaña de Nostradamus.
Esto fue un desastre, no tengo excusa. Igual pido una nueva oportunidad. No soy el mismo de enero de 2015. Afilaré la vista como Maz Kanata. Prometo concentrarme más. Prometo ser más optimista con la MUD, lo que quizás será pavoso.