«Fuentes cercanas a la situación dijeron a el Nuevo Herald que la propuesta está siendo promovida por sectores que están preocupados ante los problemas que generaría que las gobernaciones pasaran a manos de la oposición».
El periodista Antonio María Delgado señaló este viernes en El Nuevo Herald que el presidente de la República, Nicolás Maduro, está considerando suspender las elecciones de gobernadores prevista para finales de este año.
“El régimen de Nicolás Maduro está considerando la posibilidad de suspender las elecciones ante el riesgo de que la oposición tome el control de todas las gobernaciones del país, lo que desmantelaría un importante esquema de recompensas que mantiene la lealtad de militares claves”, indicó en el texto.
Asimismo, acotó que el argumento que está siendo contemplado para justificar la suspensión de los comicios es la crisis económica: “La idea es decir que no hay dinero para realizar las elecciones”, dijo una de las fuentes que habló con el diario bajo condición de anonimato.
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El régimen de Nicolás Maduro está considerando la posibilidad de suspender las elecciones regionales programadas para diciembre próximo ante el riesgo de que la oposición tome el control de todas las gobernaciones del país, lo que desmantelaría un importante esquema de recompensas que mantiene la lealtad de militares claves.
Fuentes cercanas a la situación dijeron a el Nuevo Herald que la propuesta está siendo promovida por sectores que están preocupados ante los problemas que generaría que las gobernaciones pasaran a manos de la oposición, especialmente la forzada salida de algunos de los oficiales más representativos de la logia militar que acompañó al fallecido presidente Hugo Chávez en las conspiraciones y las intentonas golpistas de 1992.
Algunos de los integrantes claves de esa agrupación, conocida en Venezuela como el grupo 4F, se consideran a ellos mismos como los verdaderos herederos de Chávez y acusan a Maduro de haber traicionado el legado del líder revolucionario, lo que ha puesto en riesgo la sostenibilidad del movimiento.
El argumento que está siendo contemplado para justificar la suspensión de las elecciones es la crisis económica, explicó una de las fuentes que habló bajo condición de anonimato.
“La idea es decir que no hay dinero para realizar las elecciones”, dijo la fuente.
Las personas familiarizadas con el tema resaltaron que la decisión de suspender las elecciones aun no ha sido tomada, dado a que conllevaría un elevado costo político y ayudaría a fortalecer la creciente percepción internacional de que Venezuela abandonó el camino democrático.
Pero la posibilidad de que lo haga no ha pasado desapercibida por la oposición.
En declaraciones recientes, el presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, advirtió que el régimen prepara la posposición temiendo un rotundo fracaso electoral.
“Ellos saben que si se van a cualquier comicios, van a resultar absolutamente perdedores”, ratificó Ramos Allup, en entrevista con el periodista Vladimir Villegas.
“Yo creo que el gobierno está cerrando las vías democráticas para evitar cualquier consulta popular, porque saben que su derrota será peor que la ocurrida [en las elecciones del] 6 de diciembre. Están esperando por un milagro que no va a llegar, este desastre no va a mejorar, ni con el petróleo a 100 [dólares]”, añadió.
Hasta el momento las autoridades del régimen han guardado silencio sobre las elecciones de diciembre.
La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE) Tibisay Lucena, evadió la pregunta sobre si este año se realizarán las elecciones de gobernadores durante una rueda de prensa realizada el miércoles.
Ante la pregunta, Lucena solo respondió que el CNE “está trabajando, ahorita tenemos esto [la activación del revocatorio], la renovación de nómina de las organizaciones políticas […] Estamos trabajando con los cronogramas que tenemos, como siempre, oportunamente, vamos a estar informando”.
Las probabilidades de una victoria chavista en unas elecciones regionales de diciembre son casi nulas, ya que la popularidad del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) está por debajo del 30 por ciento y la de Maduro, personalmente, no llega al 20 por ciento.
“En el supuesto de que haya elecciones, y en las condiciones que está el gobierno actual, es obvio de que van a perder”, aseguró en Miami la analista política Vilma Petrash.
“Históricamente, el ejecutivo en el proceso chavista ha sido el que hala las otras candidaturas. Las candidaturas del chavismo no cuentan individualmente, solo que en este momento ese poder ejecutivo concentrado en las manos de Maduro está actualmente sumamente desprestigiado”, explicó Petrash.
Salir fotografiado al lado de Maduro es en la actualidad una carga demasiado pesada para cualquier candidato oficialista, , añadió.
Por el momento, los esfuerzos de la oposición están más centrados en la realización este año del referendo revocatorio para salir de Maduro, que en la participación en las elecciones regionales a finales de año.
Para Diego Moya-Ocampos, analista senior para América Latina de IHS Global Insight, la oposición está muy al tanto de la urgencia de remover a Maduro del poder lo más rápido posible en vista de las grandes dificultades del país.
“La oposición sabe que el país no aguanta más. Y sabe que si no empujan duro hacia un referendo revocatorio, hacia una salida de Maduro, pierden la popularidad de la gente”, manifestó Moya-Ocampos.