Sistema eléctrico se ha transformado en una trampa

Esas acusaciones son gratuitas, irresponsables y le hacen más daño que bien al mismo gobierno, porque todo el pueblo sabe que no son verdad. El servicio eléctrico nacional (SEN) lo tienen sumido en el abandono, en el descuido, en el deterioro y entonces la red se ha convertido en una trampa que cobra vidas al ser manipulada sin respetar las mínimas medidas de seguridad”.

 

De esta manera se expresó el ingeniero electricista Manuel Guevara, miembro del equipo técnico de la Unidad Democrática, tras ser consultado sobre las recientes declaraciones del ministro para la Energía Eléctrica, M/G Luis Motta Domínguez, quien calificó como “actos terroristas y de sabotaje” las diversas causas que han resultado en interrupciones del suministro eléctrico a nivel nacional.

 

“Es irresponsable querer desconocer la realidad. Es irrespetuoso tratar de hacerle creer al pueblo que hay un sistema que funciona perfecto y que llega una gente mala que quiere hacerles daño y los ataca. De esta manera lo que buscan es montar una explicación, con la cual pretenden inculpar a la Unidad Democrática. Ese es en definitiva el objetivo de este tipo de señalamientos”.

 

¿Por qué se va la luz?

 

Explicó el experto que el sistema de suministro eléctrico está comprendido por otra serie de sub sistemas, categorizados en tres grandes áreas, identificadas como generación, transmisión y distribución. Cada una de ellas es susceptible a presentar fallas, sin que necesariamente las mismas deban traducirse en una interrupción. Dentro de las principales causas de la suspensión no programada del servicio se encontrarían la falta de mantenimiento, manipulación imprudente e ilegal y el vandalismo.

 

“Pero según el nuevo ministro, que lleva muy poco tiempo al frente del cargo, aparentemente todos los problemas que pasan son consecuencia del sabotaje. Cosa que es una explicación muy simplista, muy traída por los cabellos, porque busca desconocer que en Venezuela, aproximadamente desde el año 2009, el sistema eléctrico está en crisis y eso se traduce en las fallas del servicio eléctrico”.

 

Presuntas pruebas

 

Motta Domínguez exhibió imágenes fotográficas de cadáveres carbonizados que pendían de postes pertenecientes al tendido eléctrico, como presuntas pruebas del sabotaje; y suministró la identidad de uno de los presuntos saboteadores. “Ese era un hombre humilde, en una comunidad campesina, quien de manera imprudente y de manera ilegal, quiso resolver el problema eléctrico de sus vecinos y pagó con su vida esa acción”, dijo Guevara.

 

“Aparentemente este señor realizaba esas actividades de manera frecuente, porque en esa zona del estado Bolívar, de donde proviene paradójicamente la energía, son frecuentes los apagones y la respuesta de Corpoelec es deficiente en ese sector”. Adicionalmente, señaló Guevara, los trabajadores eléctricos, a nivel nacional, han visto mermada su capacidad de respuesta por el avanzado deterioro de las unidades destinadas a realizar las actividades de mantenimiento y reparación de averías, lo que ocasiona que cada vez mayor número de personas se presten a manipular de manera ilegal el tendido en búsqueda de una solución.

 

Falta de implementos e impericia

 

“Otro factor importante es que el cableado presenta una especie de monte o musgo, por la falta de mantenimiento, que facilita los cortos circuitos y las fallas en el sistema de distribución. Entonces el ministro dijo que recientemente han ocurrido cuatro casos de este presunto sabotaje, pero se le olvida que el mes pasado los sindicatos denunciaron que 16 trabajadores de la empresa murieron electrocutados por falta de capacitación y entrenamiento, fallas de los mecanismos o falta de los implementos de seguridad para trabajar con alta tensión”.

 

Estos casos fueron reseñados por los medios nacionales e incluso trascendió que los representantes sindicales habrían solicitado que se declarara la emergencia eléctrica al tiempo que recordaron que en 2012 introdujeron documentos ante el Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laboral (Inpsasel) para que se avocaran a realizar la respectiva inspección, actividad que hasta la fecha no se ha llevado a cabo.

 

“El trabajador eléctrico es muy especializado, porque para realizar sus funciones requiere guantes y botas especiales, vehículos cesta que les permitan trabajar en el tendido aéreo, toda una dotación de herramientas que deben ser suministradas por Corpoelec. Pero en ocasiones ellos mismos han narrado que tienen que pagar de sus bolsillos el combustible o los repuestos para acondicionar estas unidades y poder atender así, casi con las uñas, las averías que se presentan y así corregir o minimizar el tiempo que dura cada interrupción”.

 

El que la pone y el que la quita

 

Al ser consultado sobre los hurtos del material eléctrico instalado, el especialista comentó: “El tema del vandalismo no es exclusivo del sistema eléctrico. La gente, por necesidad, se ve tentada a robar material que sabe que pueden revender y obtener algún beneficio de esa venta ilegal. Se roban las defensas en las autopistas, se roban los cables del tendido eléctrico, se roban las baterías de las plantas. Eso no es ninguna novedad. Pero esa actividad tampoco es exclusiva de gente dentro o fuera de la compañía de electricidad. Se ha detenido a gente con cables, con repuestos, con equipos pertenecientes a Corpoelec, sustraídos de manera irregular y que ocasionan fallas por recargas o por mal funcionamiento en determinado sector. Sin embargo, no es lo que ha ocurrido en estos casos”.

 

Una luz al final del túnel

 

Para Guevara, la solución de la crisis de SEN debe partir inicialmente por asumir, desde las instancias rectoras, que existe una crisis y que solo la suma de voluntades y el ejercicio de competencias podrán sacar adelante a esta industria estratégica para la nación. “Corpoelec está muy debilitada. Hay cantidad de problemas que se han venido acumulando que han reducido su capacidad de respuesta. Muchas veces los técnicos tienen la voluntad, los trabajadores tiene la voluntad, pero no cuentan con los recursos y los instrumentos de medición para atender efectivamente las fallas y solucionarlas”.

 

“Una vez que se reconozca que hay una crisis creo que hay que mejorar el mantenimiento de las líneas – aéreas sobre todo – ya que se encuentran a la intemperie y expuestas a factores fortuitos, incendios forestales, en fin… el mantenimiento en todo el recorrido es fundamental para minimizar la posibilidad de ocurrencia de eventos que puedan causar una interrupción. Luego hay que hacer énfasis en la educación de la gente y la capacitación de los trabajadores. El tema de las instalaciones eléctricas es muy delicado y quienes aceden a ellas deben poseer los implementos adecuados y la capacitación. Y por último debe mejorar su capacidad de respuesta y debe estar en condiciones de atender los requerimientos de la población”, afirmó.

 

“Pero el problema se resuelve si, primero, decimos la verdad y, segundo, si atendemos la crisis seriamente y nos enfocamos a resolver los problemas y atendemos las deficiencias, en lugar de estar tratando de echarle la culpa a otros como parte de una estrategia electoral, de una campaña para obtener votos. En este momento que nos acercamos a un proceso electoral para elegir a los miembros del parlamento creo que deberíamos ser más responsables y no tratar de endosar nuestras responsabilidades culpando a miembros de otro sector”.

 

Fuente: Unidad venezuela