Entre la noche del sábado y la mañana de este domingo, 10 bebés recién nacidos fallecieron en el área de neonatología del hospital Luis Razetti de Barcelona, presuntamente, al contagiarse por una bacteria, según lo reseña eltiempo.com.ve
Por Eleida Briceño
Familiares de los infantes y de otros que se encuentran en delicado estado de salud, señalaron hay fallas de limpieza en ese lugar, pues es notoria la contaminación en pisos y techos.
La alarma fue mayor para pacientes y familiares cuando el pasado sábado 15 de agosto, alrededor de las 11:00 de la noche, apareció un rabipelado en esa área. Dijeron que medía unos 70 centímetros de largo. La información fue corroborada a través de fotografías que tomaron con sus teléfonos celulares.
El animal, cuyo nombre científico es Didelphis marsupialis, fue ubicado en el área de Neonatología, donde se encuentran hospitalizados los bebés prematuros. Los padres que estaban allí lograron atraparlo.
Carmen Tovar, quien visita el hospital Razetti desde hace una semana porque en este nosocomio barcelonés atienden a sus sobrinos morochos, señaló que durante esos días ha visto que “han sacado varios niños muertos”.
Yohan Pérez, otro del grupo de afectados, señaló que a las mujeres que recién dan a luz les exigen que se aseen muy bien antes de entrar a esa área, pero se incumple la limpieza general del área. “El baño del piso 9 está clausurado y las hospitalizadas se ven obligadas a bajar al piso 5 para limpiarse”.
Familiares señalaron que otra irregularidad permanente en neonatología es que las enfermeras se duermen mientras cumplen sus guardias nocturnas y si algún equipo de monitoreo de los niños comienzan a fallar no aparece ninguna.
“Anoche (el sábado en la noche) comenzaron a sonar todos los aparatos donde estaban conectados los niños y ninguna se presentó a ver qué sucedía. Nosotros los padres escuchamos los equipos, pero no nos dejan pasar”.
Dijeron que a partir de este lunes, solo las mamás de los bebés internados tendrán permiso para entrar en el área de neonatología.
Por su parte, Sandra Martínez, enfermera supervisora, dijo que la aparición del rabipelado era “algo normal en el hospital”, que hay una invasión de este animal roedor en este recinto de salud. “Pero no hay por qué alarmarse”.
Extraoficialmente, un trabajador del hospital que pidió no ser identificado, informó que en el mes de julio 48 cadáveres de neonatos salieron de esta área a la morgue del hospital.