El presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, planteó dos posibles escenarios que podrían surgir en Venezuela gracias a la mediación de Lula, Petro y López Obrador, mandatarios de Brasil, Colombia y México, respectivamente.
Para el analista «teóricamente solo hay dos posibles negociaciones que pueden promoverse en un caso como este».
La primera de ellas sería la reducción de «los costos de salida» a Maduro y de sus principales colaboradores «para provocar el reconocimiento del triunfo opositor y permitir la transición».
En un segundo escenario se intentaría «conseguir de Maduro las mejores condiciones para permitir que la oposición pueda seguir su lucha a futuro», esto se produciría solo si se asume que su permanencia en el poder es el escenario más probable.
León explicó que en el primer caso, la posibilidad de éxito solo sería posible «si Maduro creyera que sus costos de permanencia son superiores a sus costos de salida».
Sin embargo, el analista considera que esta opción tiene pocas posibilidades de éxito. Esto sin contar con que en el caso de que lo necesitara, la propuesta a realizar no sería, como ahora, un asilo y amnistía, sino una garantía de subsistencia y coexistencia de todo el chavismo.
Esto incluiría el control de algunas instituciones básicas para protegerse en el futuro y la garantía de que podrá seguir participando en la política local, con opción a su regreso en el futuro, si se producen cambios en la opinión pública.
En cuanto al segundo escenario, señaló que este no sería bien visto por el grueso de la oposición y su líder, María Corina Machado, así como por Estados Unidos (EEUU). Por lo tanto, León considera que esta segunda negociación es «claramente inviable».
«Si añadimos que la estrategia opositora que intenta provocar un cambio político por la vía de la presión social y la implosión del sistema revolucionario y militar tampoco muestra señales de éxito y el gobierno está dispuesto a enfrentarlo como sea, podríamos concluir que la situación es muy retadora para cualquiera que busque restablecer los equilibrios perdidos», explicó.
PRESIÓN INTERNACIONAL
El presidente de Datanálisis cree que la ruta que seguirán los negociadores internacionales, es presionar la cesión unilateral del gobierno, en aspectos que resultan claves para rescatar algunas condiciones democráticas básicas.
«Por supuesto que todos los países seguirán pidiendo la demostración real y verificable de los resultados electorales, como hemos visto en sus declaraciones recientes. Pero al final la negociación pragmáticamente tenderá a buscar, por ejemplo, la amnistía y liberación de presos políticos, la habilitación de los líderes opositores y sus partidos, la reforma real del sistema electoral y la enmienda constitucional que elimine la reelección indefinida y el recorte del periodo presidencial», alegó León.
No obstante, afirmó que sin resultados verificables, nada de esto será suficiente para parar la lucha de la oposición, ni llevará al reconocimiento del gobierno de Maduro.
«Pero podría generar nuevos espacios de negociación y evitar el colapso de las relaciones de Venezuela con Brasil, Colombia y México. Abrir las puertas al fortalecimiento de la lucha democrática de la oposición a futuro, y la posibilidad de evitar que el país vaya a un escenario aún más difícil de aislamiento y profundización de sanciones, que más que a una solución, conducen al país a una situación tipo Nicaragua o Irán, donde todos pierden, especialmente la gente», sentenció.
Por último, indicó que cada sector tiene que cumplir su rol en la búsqueda de soluciones. «El de los negociadores no es romper los puentes y quemar los barcos o llenar páginas enteras de insultos y calificativos que sólo bloquean las soluciones futuras», precisó.
En cuanto al segundo escenario, señaló que este no sería bien visto por el grueso de la oposición y su líder, María Corina Machado, así como por Estados Unidos (EEUU). Por lo tanto, León considera que esta segunda negociación es «claramente inviable».
«Si añadimos que la estrategia opositora que intenta provocar un cambio político por la vía de la presión social y la implosión del sistema revolucionario y militar tampoco muestra señales de éxito y el gobierno está dispuesto a enfrentarlo como sea, podríamos concluir que la situación es muy retadora para cualquiera que busque restablecer los equilibrios perdidos», explicó.
PRESIÓN INTERNACIONAL
El presidente de Datanálisis cree que la ruta que seguirán los negociadores internacionales, es presionar la cesión unilateral del gobierno, en aspectos que resultan claves para rescatar algunas condiciones democráticas básicas.
«Por supuesto que todos los países seguirán pidiendo la demostración real y verificable de los resultados electorales, como hemos visto en sus declaraciones recientes. Pero al final la negociación pragmáticamente tenderá a buscar, por ejemplo, la amnistía y liberación de presos políticos, la habilitación de los líderes opositores y sus partidos, la reforma real del sistema electoral y la enmienda constitucional que elimine la reelección indefinida y el recorte del periodo presidencial», alegó León.
No obstante, afirmó que sin resultados verificables, nada de esto será suficiente para parar la lucha de la oposición, ni llevará al reconocimiento del gobierno de Maduro.