La situación en Venezuela se vuelve cada vez más precaria ante la aguda crisis económica.
Como ya es conocido por todos, luego de una ausencia de casi 10 meses, las papas fritas regresan a los McDonalds de Venezuela, bajo el detalle de 100% hecho en Venezuela.
Pero gracias a la inflación y a la desmedida crisis económica que atraviesa la nación, una orden grande costaría cerca de 126 dólares, según el actual tipo de cambio en Venezuela.
En sí, serían alrededor de 800 bolívares, mientras que la pequeña casi 500 bolívares, reseña Fortune. Estos estándares serían los “más barato” por llamarlo de algún modo, ya que unas papas grandes en Arturos tienen un costo de más de 1700 bolívares.
Pero el precio de las papas fritas de McDonalds se quedan atrás con el del pollo asado. Según Univisión, antes costaba 199 bolívares, dos años después 1.390 bolívares.
En Venezuela rige un control de cambio desde 2003 en el que el monopolio del gobierno sobre las divisas ha derivado en una sequía de dólares en la economía, agravada por el desplome de los precios del petróleo.
La situación en Venezuela se vuelve cada vez más precaria ante la aguda crisis económica, la escasez desaforada de productos básicos, el desplome de los precios del crudo nacional y la disminución del poder adquisitivo.
El FMI así como economistas estiman una contracción del PIB de 7% para este año y una tasa de inflación superior del 100%, un panorama nada alentador mientras que el gobierno venezolano atribuye todos estos factores negativos a una “guerra económica”, según datos aportados por la agencia AFP.
AFP