La defensa de los tres exejecutivos de DirecTV en Venezuela asegura que, tras conocer que habían sido emitidas órdenes de aprehensión en su contra, decidieron entregarse el viernes ante el Servicio Bolivariano de Inteligencia, SEBIN.
Una fuente con conocimiento del caso le dijo a CNN que los cargos que evalúan imputarle a estos tres ejecutivos serían “estafa, boicot y asociación para delinquir”, por los que de ser hallados culpables, tendrían penas de hasta 12 años de cárcel. CNN pidió información al Ministerio Público, pero todavía no obtuvo respuesta. Según la legislación venezolana en la audiencia de presentación se determinaran los cargos a lugar, si el proceso amerita mantener privativa de libertad y en caso de ser necesario se determina el lugar de reclusión.
Se trata de Héctor Rivero, quien ejerció como gerente general, Rodolfo Carrano, exvicepresidente comercial y Carlos Villamizar, quien fungió como vicepresidente de estrategia y negocios de Galaxy Entertainment o DirecTV Venezuela. Antes de ponerse a disposición de las autoridades, Villamizar dijo que es inocente en una reunión con un grupo reducido de medios, entre ellos CNN. Además, aseguró que un día antes del cese de las transmisiones de DirecTV fue despedido y que el 19 de mayo se le informó sobre la decisión que había tomado la Junta Directiva de no continuar operando en Venezuela.
Villamizar sostiene que hasta ese momento desconocía que se tomaría tal medida, y que tras su salida de la empresa no tuvo de nuevo contacto con representantes de AT&T, compañía propietaria de DirecTV.
El exejecutivo destaca que llevaba cinco años trabajando en la empresa, y que su función era desarrollar estrategias de comercialización. Dice estar muy sorprendido por la medida, especialmente porque se siente afectado en todo este proceso al igual que otros 600 trabajadores que fueron despedidos, sostiene.
Sin embargo, desde el Tribunal Supremo de Justicia, TSJ, ordenaron que a Villamizar, Rivero y Carrano les congelaran sus cuentas y les dictaran prohibición de enajenación de bienes y servicios, así como prohibición de salida del país. Ante esa situación, los acusados decidieron acudir al TSJ y a la Fiscalía General de la República para iniciar acciones contra DirecTV y AT&T por considerarse afectados en lo personal.
Villamizar afirma que siempre han “dado la cara” y se considera “inocente de todo esto”. También argumenta que siempre velaron por tratar de llevar lo mejor a los más de 2 millones de suscriptores que tenían en el país. En ese sentido, aseguró que se pondría, minutos después, a disposición de las autoridades y que espera que “haya justicia”, porque asegura ser inocente.
El abogado defensor de Carrana, Loreto y Rivero, Jesús Loreto, destacó que sus clientes en todo momento contribuyeron con la Fiscalía General de la República y el Tribunal Supremo de Justicia y acudieron a ambas instalaciones como parte del proceso. Señala que se está cometiendo una enorme injusticia, porque si hay algún responsable, no sería ninguno de estos tres ejecutivos, reseña CNN