Tras un escándalo de corrupción que sacudió a por lo menos una decena de diputados de la Asamblea Nacional, el fundador de Voluntad Popular, Leopoldo López, se pronunció por primera vez.
El dirigente aseguró que el país sigue avanzando hacia la ruta de la libertad, destacando un comunicado de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo (Usaid) en el que recuerdan que los fondos de ayuda humanitaria no son manejados por Juan Guaidó. “Acaba con las mentiras sembradas por quienes se prestan para el plan del usurpador”, dijo López, en clara referencia a algunos sectores de la oposición venezolana.
“Hoy, en una histórica reunión del TIAR, aprobamos sanciones contra Maduro y 28 de sus cómplices. La Usaid emitió un comunicado que deja muy claro el tema de la ayuda humanitaria y acaba con las mentiras sembradas por quienes se prestan para el plan del usurpador“, comentó el presidente del partido político Voluntad Popular.
Además, afirmó que le parece positivo el hecho de que el Departamento del Tesoro impuso nuevas sanciones contra seis buques petroleros con los que Maduro “pretendía seguir regalando nuestro petróleo”. Expresó que con la ayuda de los aliados y de la OEA, Venezuela alcanzará la libertad.
López, se mantiene desde hace siete meses en condición de huésped en la Embajada española ubicada en Caracas, luego de que permaneció encarcelado durante casi tres años y medio y estuvo casi otros dos en arresto domiciliario.
La declaraciones del dirigente son sus primeras reacciones tras un momento difícil de la oposición a la dictadura, después de diversas acusaciones por corrupción que involucran a varios parlamentarios a la Asamblea Nacional. En ese sentido, Guaidó ordenó la suspensión de los legisladores señalados, y decretó la intervención de la Comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional, designando además una instancia presidida por Edgar Zambrano, que investigará los hechos denunciados originalmente por el periodista Roberto Deniz en el portal Armando.Info.
Una decena de diputados de la oposición fueron acusados de obstruir investigaciones contra el empresario Alex Saab, calificado como “testaferro” de Nicolás Maduro, y presunto responsable de una trama de corrupción con productos de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción.