Juan Guaidó afirmó este sábado que la detención de su tío, acusado de trasladar material explosivo en un vuelo, no le va a mover «ni un ápice» en su lucha ante el Gobierno de Nicolás Maduro.
«Quiero decir y verles la cara muy bien a los dictadores, no nos van a mover un ápice, si nos toca pagar un costo o el sacrificio, ya lo hemos hecho, no solamente como familia, sino como las 380 familias que hoy sufren exactamente esto», dijo Guaidó, que es reconocido como presidente interino por más de 50 países.
El tío del dirigente político, Juan José Márquez, fue detenido el martes cuando llegó a Caracas en un vuelo procedente de Lisboa de la aerolínea portuguesa TAP, en el que también viajaba Guaidó.
El abogado Joel García, defensor de Márquez, tachó este jueves la detención de su cliente de «vil y burdo montaje» y lo consideró como una forma de presionar al líder opositor.
«El mensaje lo recibí y aquí está la respuesta: adelante y con fuerza», dijo Guaidó durante una rueda de prensa, en la que manifestó que «el dolor de los cinco hijos de mi tío, de sus amigos y sus familiares, es parte del sacrificio de los millones de venezolanos que están en esta posición».
«En lo personal estoy pagando un costo», aseveró e denunció la reclusión de su familiar en la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), un cuerpo de seguridad en el que, según él, «torturan».
Asimismo, apuntó que su tío «no es un rehén que vamos a transar», pues «los derechos no se negocian» y por ello se enfrentará a la Administración de Maduro «con mucha más firmeza y determinación» pues «es inevitable una transición en Venezuela».
Sostuvo que la detención de su tío se produjo porque «no hay dirección política y la pagan con mi entorno».
A juicio de Guaidó, el Gobierno «no tiene las esféricas» para detenerle pues «ya tiene un año y medio en el mismo cuento».
Este viernes, Maduro aseguró que «el día que los tribunales de la República den el mandato de detener al señor Juan Guaidó por todos los delitos que ha cometido, ese día va a la cárcel, ten la seguridad. Ese día no ha llegado, pero llegará».
Al respecto, Guaidó afirmó que los tribunales venezolanos «están secuestrados».
Rechazó acusaciones contra su tío
Guaidó rechazó las afirmaciones de las autoridades venezolanas, que acusan a Márquez de haber traslado explosivos en el vuelo de la aerolínea portuguesa TAP.
Fue arrestado en primer lugar por funcionarios de aduanas tras, presuntamente, detectar que trasladaba explosivos sintéticos, chalecos antibalas y un plan, redactado en inglés, para cometer atentados terroristas en Venezuela.
«Es imposible colocar material explosivo en una línea comercial, no solo TAP, sino europea, y fueron más allá, cuando hay un jefe de Estado hay medidas adicionales y fueron aplicadas con rigor», explicó Guaidó, al tiempo que agradeció las aclaratorias que ofrecieron las autoridades portuguesas.
Dijo que con la acusación contra su tío y la «siembra de evidencia», la Administración de Maduro «queda en ridículo» y es «es un desprecio absoluto al raciocinio».
Además, desmintió que él haya usado una falsa identidad para abordar el vuelo y lamentó que a la Administración de Maduro «no le gusten» sus nombres, reseñó EFE