“La lucha contra la corrupción y los procedimientos judiciales deben llegar a todos los niveles de la administración pública, ya que no existe corrupción buena o mala”, expresó el abogado y analista político Johel Orta Moros.
En este sentido, reiteró que todos los actos de corrupción deben ser rechazados y los organismos competentes deben ir al fondo de las investigaciones, ya que a su juicio, «tristemente, Venezuela se ha convertido en una sociedad de cómplices».
“De acuerdo a datos extraoficiales, los más conservadores hablan de 3 mil millones de dólares, mientras que otros aseguran que sobrepasan los 23 mil millones; sin embargo, han salido de Venezuela cerca de 350 mil millones durante los últimos años, que son capitales que se han ido hacia bancos europeos y de Estados Unidos”, afirmó Orta.
Por otra parte, manifestó que la Ley Orgánica de Extinción de Dominio, aprobada recientemente en primera discusión por la Asamblea Nacional (AN), permitiría recuperar los capitales o transferir la titularidad al Estado de bienes relacionados con actividades ilícitas para ser subastados. «No para que el Gobierno se crea propietario de grandes metros de construcción, vehículos, aviones, casas de playa o botes y al final no se destinen a dar solución a los problemas reales de los venezolanos», agregó.
“Por ejemplo, en el municipio Baruta se habla de más de un millón de metros cuadrados de construcción que serían ocupados entre 15 y 25 años, según los datos ofrecidos por la Cámara Inmobiliaria; lo que indica que si ese dinero una vez obtenido por las autoridades al ser vendidas esas propiedades, los recursos podrían ser invertidos en temas primordiales para el país como educación, salud, ajuste salarial de los empleados de la administración pública y pensionados así como infraestructura y recuperación de las múltiples empresas del Estado que se encuentran quebradas”, agregó.
Adicionalmente, el analista político recordó que durante los últimos 22 años en Venezuela se comenzaron obras de infraestructura mil millonarias, entre las que se encuentran: el Puente sobre el Río Orinoco, puertos de aguas profundas, empresas de tubos sin costura, proyectos destinados a la industria maderera, además de aproximadamente 11 proyectos magnos que se establecieron con empresas brasileñas y empresas que pasaron a manos del Estado, que lamentablemente fueron “mal administrados y colapsaron”, en los que se invirtieron importante suma de recursos y deben ser investigados.