El aumento de la morbimortalidad infantil en las últimas semanas en el Hospital Luis Ortega, ubicado en Porlamar, mantiene en alerta a los directivos del Colegio de Médicos de Nueva Esparta.
José Antonio Narváez presidente de ese gremio profesional, resaltó que han visto con preocupación las denuncias de padres y madres que han visto fallecer a los bebés en ese centro, donde no existen las condiciones mínimas para prestar una atención medianamente aceptable.
“Hemos visto en los últimos días que han aumentado los índices de morbimortalidad en los distintos ambientes, llámese pediatría, medicina general y obstetricia. Hemos visto cómo mueren día a día los niños que nacen prematuros en vista de, por una parte, las condiciones del hospital que tienen mucho qué desear. Tenemos más de dos semanas sin aires acondicionados, con quirófanos con 28 y 30 grados de temperatura y trabajando en esas condiciones”, denunció Narváez.
Confirmó que ese hospital fue intervenido el pasado 20 de abril y hasta ahora no han visto avances en la mejoría del mismo en cuanto a infraestructura y dotación.
En las afueras del principal centro asistencial de referencia de la isla, Wilmer José Reyes esperaba le dieran de alta a su bebé recién nacida, con la cual ha tenido que luchar para que sobreviva a la supuesta mala calidad de la atención que le prestan.
“Mi niña nació bien y a las 12 horas tenía afección respiratoria. A los dos días, la vi convulsionando y botando sangre por la boca. En 15 días que llevo aquí, he visto morir 30 niños. Solamente el lunes amanecieron muertos 7 bebés”, aseveró.
Exhortó a las autoridades del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales y del Ministerio para la Salud, a tomar en cuenta la falta de insumos en el principal centro asistencial de Nueva Esparta.