“Cuando conocí a Chávez no dudé ni un milímetro de segundo”, es la nueva genialidad del presidente de la República, Nicolás Maduro, quien ni siquiera se atrevió a retroceder, o al menos sonreír, como quien sabe que se ha equivocado de manera natural. No, el primer mandatario siguió firme con su discurso y sabrá Dios si por su cabeza pasaría en algún momento que en el bachillerato nos dejaron muy claro que los segundos no cuentan con milímetros.
Video vía VTV
https://youtu.be/9yUinbM9Pwo
LP