Desde el año 2007 se prometió darle a los habitantes de Guarenas y Guatire, un medio de transporte público eficiente, que finalizará con la pesadilla que representaba vivir en estas ciudades dormitorios y trabajar en la ciudad de Caracas.
Hasta 3 horas o más, si acaso se presentaba un accidente en la vía, pasaban los guatireños y guareneros asfixiados en el tráfico de la autopista Petare-Guarenas, desde que ambas ciudades comenzaron a poblarse, por la tranquilidad que ofrecían y la cercanía con la ciudad capital.
Ante esta situación, durante la gestión del fallecido expresidente Hugo Chávez se planteó la construcción del Metro de Guarenas-Guatire, con el fin de aliviar la afluencia vehicular y garantizar a aquellos ciudadanos que no disponían de vehículos propios, un sistema de traslado seguro y rápido.
Fueron 2.3 billones de dólares, los que se invirtieron en la obra inicial, la cual debía estar lista en el 2012.
Han pasado casi 10 años y tanto a las vigas como las columnas y las vías férreas, colocadas convenientemente durante las múltiples campañas electorales en el país, puede observárseles el óxido.
Y es que como ha denunciado la diputada a la AN por el estado Miranda, Adriana D’Elia, el gobernador de la entidad, Henrique Capriles Radonski o simplemente cualquiera que pase por allí y conozca de esta monumental obra “a medias”, siempre ha sido utilizada para levantar el ego de los candidatos chavistas de la zona o del gobierno en sí, cuando se ve perdido entre tantas promesas incumplidas.
Para muestra de ello, el discurso emitido por el presidente Nicolás Maduro el pasado mes de diciembre, previo a las elecciones legislativas, en la que por primera vez el gobierno perdió, por goleada, en la llamada “cuna de la revolución”.
“Pueblos de Guarenas y Guatire, se los juro, en el año 2016 van a tener su servicio de tren y de allí vamos a Caracas”, eran las palabras de regocijo del primer mandatario, para que nuevamente en enero 2016 la paralización de la obra lo dejarán al descubierto.
Y ha sido así por más de 5 años, tiempo en que se prometió sería culminado.
La población de Guarenas y Guatire tendría su metro en funcionamiento en el año 2012, pero muy lejano a ello, en el 2016 ya despidiéndose, no han podido ni disfrutar de la primera ruta que debía estar activada.
Mientras tanto, los andenes que ya se lograron instalar siguen esperando los vagones que le transitarán.
Las pruebas que se han realizado hasta el momento solo han generado más expectativas ante los ciudadanos que cada día se aferran más al servicio de Metrobús o las llamadas “vans”, que pese a su alto costo para el traslado hasta Caracas, resultan más seguras y eficaces, al momento de elegir entre las pocas opciones que poseen quienes habitan en estas ciudades.
La población crece y entre la esperanza y la resignación, viven el diario sin obtener respuestas. “Claro que lo terminarán, todavía no se termina el año”, agrega Virgilio Bello,residente de Guarenas, quien apuesta todavía al gobierno nacional, según lo relatado por el diario La Región. Por otra parte, personas como Douglas Perdomo se cuestionan que 10 años después, “eso es lo qué hay“, mientras observa las vías por donde pasará el “bendito metro”.
Medios de comunicación, dirigentes políticos, dirigentes comunales y vecinos se han pronunciado sobre el hecho sin lograr captar la atención de un gobierno que atraviesa su peor momento, al menos hasta la fecha en que se avecine otra elección y empiece de nuevo la activación de la obra.
por Daniela Martin/Venezuela Al Día en noticiasaldiayalahora.co