La Biblioteca Gustavo Leal de la Escuela de Comunicación Social de la Universidad Central de Venezuela ha sido intervenida integralmente como parte de los trabajos que ejecuta el Gobierno nacional en el campus universitario, a través de la Comisión Presidencial para la Recuperación de la UCV.
Entre las obras efectuadas en el lugar, situado frente al Comedor Universitario, se encuentra la remoción de las rejas de las ventanas, que violaban la normativa de la Unesco en el Patrimonio Mundial. En la fachada también se efectuó la sustitución del vidrio templado y el mantenimiento integral.
De igual manera, se realizó la intervención completa del techo, las paredes y el piso. Además, se recuperaron 18 luminarias patrimoniales y se colocó iluminación en las vitrinas, donde se exhiben máquinas de escribir antiguas y otros insumos que eran utilizados en la Escuela de Comunicación Social.
Parte del mobiliario también fue remozado. A las mesas les colocaron topes nuevos y el borde, así como también fueron rehabilitados piezas sanitarias de los baños, refiere la Comisión Presidencial para la Recuperación de la UCV en su web.
Para mejorar la climatización de la biblioteca, se instalaron dos equipos de aire acondicionado compacto de 10 toneladas.
La mezzanina, que estaba oculta con rejas y un panel detrás de la baranda, fue remodelada. Allí se instaló una oficina para la dirección de la biblioteca y se quitaron todas las obstrucciones del área, que ahora muestra la imagen continúa de las ventanas que tienen vista a parte de las zonas verdes de la Ciudad Universitaria.
Historia
Según relata la historia de la UCV, el lugar que alberga hoy la biblioteca funcionó en principio como un almacén, donde vendían insumos de librería. Luego fue cafetín, después un espacio de exhibición de antropología y una librería de la Organización de Bienestar Estudiantil.
La profesora Yelitza Rodríguez, directora de la biblioteca, explicó que la biblioteca fue bautizada como Gustavo Leal, quien era el presidente del Centro de Estudiantes de Comunicación Social y recibía el material académico que dejaban los estudiantes egresados para que otros lo pudieran utilizar. En un pequeño espacio del piso 2 de la Escuela de Comunicación Social almacenaba las guías, copias de artículos y los textos bibliográficos.
En el año 69, cuando ya se iba a graduar, Leal perdió la vida en un accidente automovilístico camino al estado Lara. Ante esta situación, los compañeros del centro de estudiantes solicitaron a la Facultad de Humanidades y Educación para que les diera el espacio que estaba disponible frente al Comedor Universitario e instalar allí una biblioteca con el material que tenía Gustavo. Después de varios trámites, finalmente en 1976 entró en funcionamiento la biblioteca.