Ana Costa no titubea. Lo dice sin esperar ni un segundo: “No confío”. La mujer tiene 30 años en Las Quintas, en Naguanagua y desde hace 20 compra botellones de Polietileno con agua potable. Los utiliza hasta para cocinar , pues teme lo que las cifras oficiales confirman: el agua que suministra el Estado no cumple los estándares. El aluminio supera 86,80% lo establecido en las “Normas Sanitarias de la Calidad del Agua Potable”
Toma un botellón y una olla. Prende su cocina. Va hasta el lavandero, donde tiene un balancín con uno de los cuatro botellones que usan por semana en la casa. Ana, quien tendrá 47 años —piel oscura, fornida— pone a calentar un poco de agua, mientras invita a pasar.
La calidad del agua es cuestionable. En octubre los parámetros estuvieron desajustados por 10º mes consecutivo. El informe publicado de la Hidrológica del Centro (Hidrocentro) lo confirma. El aluminio está 86,80% por encima de lo que estipulan las “Normas Sanitarias de la Calidad del Agua Potable”, ley vigente desde 1999, analizó el ingeniero civil sanitarista Manuel Pérez Rodríguez.
La gente sabe que el agua no es apta. “La gente no cocina ni se ducha con lo que sale por las tuberías”, agrega el también director general del Movimiento por la Calidad del Agua. Pérez advirtió sobre los riesgos neurológicos que puede tener la acumulación a largo plazo de aluminio en el cuerpo, en un informe enviado en exclusiva a El Carabobeño.
El aluminio es indispensable para el saneamiento. En las plantas, como la Alejo Zuloaga de Tocuyito, se utiliza en los estanques. Se vierte en partículas pequeñas que se adhieren al sucio y por ser un metal hace que se precipite al fondo del estanque. Así queda agua limpia en la superficie.
Pero cuando el agua está tan sucia, como la que viene del embalse Pao Cachinche y entra a la Alejo Zuloaga, no importa cuánto aluminio se vierta, el material orgánico no se precipita porque hay demasiado. Es así como termina en hogares como los de Ana y otros tres millones de ciudadanos afectados en los estados Aragua y Carabobo.
Hidrocentro está obligado a presentar ante la opinión pública 54 parámetros de la calidad del agua potable mensualmente. Esto también se incumple, pues lo ofrecido en la página web oficial del organismo es una tabla con apenas 11 valores.
Fuente: El carabobeño