Academia de Ciencias: Asintomáticos deben estar en su casa o centros de atención primaria

Expertos de la Academia Nacional de Medicina, el Instituto de Medicina Tropical de la Universidad Central de Venezuela, la Alianza Venezolana por la Salud, y la Sociedad Venezolana de Infectología proponen revisar política hacia el covid-19.

«El aislamiento de personas infectadas que no requieren hospitalización debe ser en sus casas o en centros de atención primaria, con protocolos claros para el tratamiento de síntomas y el cumplimiento efectivo de la cuarentena».

Así lo plantean la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales, la Academia Nacional de Medicina, el Instituto de Medicina Tropical de la Universidad Central de Venezuela, la Alianza Venezolana por la Salud y la Sociedad Venezolana de Infectología, a través de un comunicado.

En este sentido,las academias proponen «medidas de restricción o flexibilización de actividades colectivas basadas en criterios transparentes que incluyan metas objetivas, una clasificación clara de los sectores de la actividad económica, evaluaciones continuas de las tasas de contagio, el número de casos nuevos, la capacidad hospitalaria instalada y las proyecciones a corto y mediano plazo de los modelos matemáticos».

Venezuela acumula, oficialmente, 17.860 casos confirmados de covid-19 con 158 muertos. La comunidad médica y científica recomienda, además, «una política comunicacional de prevención de la enfermedad dirigida a toda la población. Sólo si los ciudadanos tienen una correcta percepción del riesgo y entienden el beneficio, cooperarán y adoptarán medidas individuales”. Aseguran que “las mascarillas combinadas con el distanciamiento físico pueden reducir la probabilidad de contagio hasta en un 60%”.

De acuerdo con el documento, se requieren «protocolos de tratamiento ajustables, con medicamentos en fase de ensayo o de carácter compasivo. La administración del tratamiento debe contar con la evaluación de una Comisión de Bioética y con la aprobación del enfermo o su representante legal».

Desde el punto de vista farmacológico, los expertos de las academias proponen «protocolos de tratamiento ajustables, con medicamentos en fase de ensayo o de carácter compasivo. La administración del tratamiento debe contar con la evaluación de una Comisión de Bioética y con la aprobación del enfermo o su representante legal».