José Gregorio Ferrer Jurado, de 27 años y nacionalidad venezolana, murió luego de haber recibido una puñalada en el cuello tras una pelea con un connacional por un plato de comida de 3.000 pesos (1 dólar) en Barranquilla, Colombia.
Ferrer era conocido por sus allegados como Chiquito, provenía de de Maracaibo y tenía cuatro meses de haber llegado a Barranquilla, desde entonces trabajaba en las calles haciendo “lo que le saliera”; era padre de dos niños.
El pasado sábado, Ferrer sostuvo una pelea con otro venezolano apodado Pinky porque fiaron una comida de las que vendían y tenían que pagarla. El hecho ocurrió en el barrió San Roque, Barranquilla.
Pinky le estaba pidiendo a Chiquito que pagara su parte; a principio de discusión de pasó a mayores. Ferrer regresó a su casa y le contó a su hermana. Alrededor de las 11:30 p. m. los hombres se volvieron a encontrar, discutieron y Pinky presuntamente le propinó una puñalada en el cuello que lo dejó agonizante.
Los familiares de Chiquito trataron de auxiliarlo y fue trasladado al Hospital General de Barranquilla, donde se complicó por la gravedad de la herida y falleció el martes 19 de marzo.
“A Ferrer Jurado le fiaron una comida y el que lo mató había servido de codeudor. El tipo le reclamó porque no había pagado los 3 mil pesos, y por eso discutieron. En medio de la pelea el sujeto le dio una puñalada en el cuello y luego huyó”, dijo una fuente policial al diario colombiano Al Día.
Las autoridades colombianas no han logrado dar con el paradero de Pinky, quien se encuentra desaparecido desde la riña; la Policía presume que podría haber huido a Venezuela.