Una pareja transexual en Cuba sorteó prejuicios y contrajo matrimonio civil en La Habana, un hecho inédito en la isla socialista, aunque debieron inscribir su unión con sus géneros registrados legalmente en sus documentos, masculino y femenino, sin vulnerar las normas.
“Este acto jurídico no transgrede lo establecido en el ordenamiento jurídico cubano, pues se trata de dos personas cuyo género registrado legalmente es femenino y masculino aunque no sean coherentes con las identidades de género de Ramsés y Dunia”, los nuevos esposos, explicó el estatal Centro Nacional de Educación Sexual.
La nueva Constitución, vigente desde abril, prohíbe la discriminación por identidad de género. También define el matrimonio como una institución social y jurídica, pero no legisla sobre los contrayentes. Eso será materia de un nuevo Código de Familia, aún en elaboración. El actual solo reconoce la unión heterosexual.
Ramsés, hombre transgénero, y Dunia, mujer transgénero, contrajeron matrimonio el 16 de julio en el Palacio de Matrimonios de San Francisco de Paula de La Habana, una entidad perteneciente al Ministerio de Justicia, y no sin contratiempos. La pareja hizo un primer intento fallido. Luego debió intervenir el Cenesex, que entregó asesoría jurídica a la pareja y al personal a cargo de resolver el caso.
“Nunca pasó por sus mentes encontrar negativas asociadas a su identidad de género y mucho menos llegar al punto de recibir sugerencias de ir vestidos conforme al género registrado en su documento de identidad», escribió el activista Arturo Ochoa.
“No hay norma jurídica que obligue a los contrayentes del matrimonio a ir vestidos de una manera en particular, mucho menos una alusión a las ropas o atributos en relación con el género de la persona”, explicó el subdirector del Cenesex, Manuel Vásquez, a la página de Internet Entre Diversidades. Ambos están a la espera de intervenciones quirúrgicas para cambio de sexo, informó el Cenesex. Esa cirugía es gratuita en la isla.
En Cuba, los homosexuales sufrieron hostigamiento sobre todo en los años inmediatamente posteriores al triunfo de la revolución, un hecho por el que el ex presidente Fidel Castro (1926-2016) pidió perdón. Sin embargo, hace más de una década el Cenesex promueve la lucha por los derechos de las personas LGBTI, bajo la dirección de la diputada Mariela Castro, hija del ex presidente y líder de la revolución Raúl Castro.
La institución promovió la inclusión en la nueva Constitución del concepto de matrimonio como «unión entre dos personas», aunque no consiguió apoyo mayoritario.
El año pasado, un tribunal de Cuba otorgó la custodia de tres niños a su abuela materna y aceptó el rol de su pareja homosexual (madrina de los menores) en la crianza de estos, en una sentencia inusual en la isla. La madre de los niños había muerto de cáncer y el padre se desentendió de la familia.