Una mujer norteamericana está presa en los Emiratos Árabes Unidos donde podría cumplir una condena de hasta cinco años porque supuestamente insultó por WhatsApp a su empleador en Abu Dhabi, aunque en realidad se equivocó en la traducción y empleo de la palabra que usó para solicitar el pago de su salario de tres meses.
Nichole Coffel fue acusada por el reconocido jinete, Anoud Sultan Al Suwaidi, de enviarle un mensaje de texto ofensivo por WhatsApp.
La mujer originaria de Kansas, en Missouri, llegó a Abu Dhabi desde hace tres años y actualmente se desempeñaba como directora de operaciones del club ecuestre de Al Suwaidi.
Su pesadilla comenzó hace algunos meses cuando fue mordida por uno de los caballos de su jefe, lesión que le ocasionó serios problemas con su salud y una fractura enorme en sus cuentas bancarias. Tiempo después dejó de recibir el pago correspondiente por sus actividades laborales.
Coffel, de 45 años, declaró al Daily Mail que fue acusada por un mensaje malinterpretado. Explicó que la conversación con su entonces jefe fue para reclamar el pago que ya no obtuvo durante tres meses y una compensación monetaria por la lesión provocada por un caballo en el establo del club ecuestre.
En su objetivo por persuadir a Al Suwaidi para recibir su pago utilizó una palabra que fue interpretada de manera diferente. Ella se refirió a la falta de pago como «haram», una palabra que en árabe significa «prohibido».
Este mensaje fue considerado por su jefe como ofensivo y remitió el caso ante las autoridades, por lo que Nichole Coffel fue arrestada por cuatro horas. Las leyes sobre delitos informáticos de los Emiratos Árabes Unidos consideran que insultar a otros por medios electrónicos es un delito grave.
La madre de tres niños fue recluida en una estación de policía de Abu Dhabi e interrogada por agentes árabes sin la presencia de un traductor.
«Ni siquiera me proporcionaron un traductor cuando me entrevistaron hasta que la embajada arregló para que proporcionaran uno de forma remota», dijo la mujer al Daily Mail.
Su arresto acabó cuando la Embajada de Estados Unidos intervino para defenderla, pero hasta que no se retire el cargo en su contra o ocurra su comparecencia ante el tribunal no puede abandonar el país y podría cumplir una condena de hasta cinco años.
«Pero aún así no prestaron atención a lo que tenía que decir. Todo lo que hice fue pedir mi salario y ayuda para cubrir el costo de las facturas médicas después de que el caballo de Anoud me mordió», continuó.
«Ahora me dicen que podría ser encarcelado por cinco años. Da mucho miedo», señaló.
Anoud Sultan Al Suwaidi es un personaje muy importante en Abu Dhabi y sobre este caso declaró: «Entró en mi establo y sacó un caballo indómito, e intentó entrenarlo sabiendo que al ingresar al establo los letreros y las instrucciones de seguridad indican que solo los entrenadores son responsables de mis caballos y mi club ecuestre no se hace responsable de ninguna lesión. Ella fue mordida y está luchando por una indemnización».
Agregó: «La traté como una amiga necesitada, todavía estoy dispuesta a perdonarla por ser un ejemplo para todos los niños apadrinados que cuido».
El caso de Nichole Coffel continúa su curso, pero ahora con la intervención de Detenidos en Dubai, una organización encargada de ayudar a los extranjeros acusados en los Emiratos Árabes Unidos.
Radha Stirling, directora ejecutiva de este organismo, señaló que este caso pudo ser conducido de esta manera para desviar la atención del pago de salarios no cubiertos.
«Nichole no amenazó ni insultó al señor Al Suwadi, simplemente pidió que le pagaran por su trabajo y por sus heridas», señaló la funcionaria de Detenidos en Dubai.
«La solicitud de pago de Nichole se calculó erróneamente para ajustarse a la definición opaca de los EAU de una violación del delito cibernético y para distraerse de la responsabilidad del señor Al Suwadi de pagar el salario de Nichole», señaló.
«En cualquier disputa, es natural suponer que hay quejas válidas en ambos lados; pero este caso involucró tres cosas específicas: Nichole no fue pagada, Nichole resultó herida y Nichole fue acusada injustamente de un delito por pedirle a su empleador una compensación legítima», explicó.
Anoud Sultan Al Suwaidi prometió cubrir el pago correspondiente pero hasta ahora no lo ha hecho, por lo que la defensa de Nichole espera que sí cumpla su promesa de retirar los cargos para que pueda volver a casa con sus hijos.
«Es una locura que pueda ser encarcelada por cinco años por un mensaje que solo una persona vio. «, dijo al medio británico, Nick, uno de los hijos mayores de la acusada.