La exfinalista de Miss Suiza, Kristina Joksimovic, de 38 años, fue estrangulada, desmembrada y posteriormente «licuada» por su esposo, quien actualmente enfrenta un juicio por asesinato.
De acuerdo con lo informado por el medio suizo Bz Basel, el crimen tuvo lugar en la comunidad de Binningen el 13 de febrero. Los detalles del caso se hicieron públicos a raíz de una reciente decisión del Tribunal Federal en Lausana, que denegó la solicitud de liberación del acusado.
El imputado admitió haber asesinado a su esposa, alegando que ella lo había atacado con un cuchillo. Sin embargo, en una audiencia anterior, había cambiado su relato, afirmando que encontró a su esposa muerta y, en un ataque de pánico, desmembró su cuerpo en la lavandería.
Las pruebas forenses contradicen esta versión, sugiriendo que la mujer fue estrangulada antes de ser desmembrada con herramientas como una sierra de calar, un cuchillo y tijeras de jardín. Posteriormente, partes de su cuerpo fueron trituradas y disueltas en productos químicos.
Los informes de las autoridades describen el comportamiento del acusado como una manifestación de «masiva violencia y rasgos sádicos». Se ha revelado que, tras el asesinato, mostró una significativa frialdad y falta de empatía, intentando ocultar el crimen. Además, testimonios anteriores indican que tenía un historial de violencia, habiendo agredido anteriormente a una expareja.
La víctima dejó atrás a sus dos hijos, quienes ahora se enfrentan a las devastadoras consecuencias de este trágico episodio.