El pastor puertorriqueño Javier Donate tenía un objetivo: viajar a Bogotá, en Colombia, para hablarles del “amor de Jesucristo” a prostitutas que ofrecían sus servicios en un local de la ciudad, pero la “sorpresa” se la llevó cuando estuvo al frente de una mujer de nacionalidad venezolana.
“Entramos a una casa de prostitución y contratamos a unas chicas, las llevamos a una habitación y, en lugar de tener sexo con ellas, les hablamos del amor de Jesucristo”, narró el pastor en un video que se viralizó en Facebook, publicado por Noticias El Salvador. El hombre asistió con otro religioso y durante todo el momento tuvieron cámaras escondidas en un bolígrafo y en unos lentes.
El costo por cada mujer fue de 30 mil pesos colombianos, lo que equivale a 10 dólares americanos, según indicó Donate. “¡Un atentado contra la dignidad humana!”, dijo. Ambos contrataron a dos mujeres, la primera comentó que a veces le tocan clientes a los que no le provoca ver ni tocar porque “son asquerosos con uno, son feos y son de una manera muy desagradable”, describió.
“Nosotros estuvimos orando y Dios inquietó nuestro corazón para venir acá y escoger solamente a dos chicas. Y te escogió a ti, no sé porqué. De parte de Dios, él te dice que eres una princesa y él te ama profundamente. Y este no es tu lugar, ¿lo sabías?“, con esas palabras recibió el pastor a la prostituta venezolana, la segunda que entró al cuarto.
La “sorpresa” surgió luego de que Donate le preguntó a la mujer qué la había llevado a ejercer la prostitución. “Mi país. Yo soy de Venezuela. Yo era cristiana evangélica también”, confesó Vanessa, nombre con el que se presentó. “La respuesta de esta joven nos dejó aturdidos (…) Ella entendió que nuestra visita era un mensaje bien claro de Dios para su vida”, concluyó el evangélico, reseña AFP
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