Un fuerte terremoto de magnitud 6,9 sacudió el centro de Filipinas

El sismo, con epicentro frente a la isla de Cebú y a solo 10 kilómetros de profundidad, provocó escenas de pánico, evacuaciones y algunos daños estructurales

por INFOBAE

Un terremoto de magnitud 6,9 sacudió la costa central de Filipinas este martes, informó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), sin que se registraran de inmediato víctimas ni daños. El epicentro se localizó en el mar, frente al extremo norte de la isla de Cebú, cerca de la ciudad de Bogo, que cuenta con más de 90.000 habitantes. El hipocentro se situó a tan solo 10 kilómetros de profundidad, según el Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología (Phivolcs).

Las autoridades locales advirtieron sobre una posible “leve alteración en el nivel del mar” y exhortaron a los residentes de las islas de Leyte, Cebú y Biliran a “mantenerse alejados de la playa y no acercarse a la costa”. Asimismo, se solicitó a la población “estar alerta ante olas de tamaño inusual” y se recomendó trasladarse a zonas de mayor altitud en caso necesario.

El Phivolcs señaló que se trata de un terremoto de intensidad alta, especialmente en las zonas de San Fernando y Cebú, registrado sobre las 22.00 hora local, de origen tectónico, y anticipó que se esperan réplicas durante las próximas horas por lo que pidió a la población “permanecer alerta”, también ante “inconvenientes de menor gravedad”.

En varias localidades, los habitantes narraron momentos de pánico. Joey Leeguid, bombero de Cebú en la localidad de San Fernando, relató a AFP“Sentimos el temblor en nuestra estación, fue muy fuerte. Vimos cómo nuestro casillero se movía de un lado a otro, nos sentimos un poco mareados por un momento, pero ahora estamos bien”.

El Phivolcs señaló que seEl Phivolcs señaló que se trata de un terremoto de intensidad alta, especialmente en las zonas de San Fernando y Cebú

En Bantayan, un área turística cercana al epicentro, Martham Pacilan, de 25 años, contó: “Escuché un fuerte estruendo proveniente de la dirección de la iglesia y luego vi caer piedras de la estructura. Por suerte nadie resultó herido. Estaba en shock y en pánico al mismo tiempo, pero mi cuerpo no podía moverse, solo me quedé esperando a que el temblor terminara”.

Numerosos residentes tuvieron que evacuar sus viviendas en la ciudad de Iloílo, en la isla de Panay, ante el temor de posibles derrumbes. Las autoridades también reportaron daños estructurales en varios puntos del país.

Agnes Merza, cuidadora de 65 años, comentó: “Se sentía como si todos fuéramos a caer. Es la primera vez que experimento algo así. Los vecinos salieron corriendo de sus casas. Mis dos ayudantes adolescentes se escondieron debajo de una mesa porque eso les enseñaron en los boy scouts”. Según su testimonio, las baldosas de su cocina quedaron agrietadas tras el sismo.

En un primer momento, el USGS reportó una magnitud de 7,0, antes de corregirla a 6,9. Por su parte, el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico precisó que “no hay amenaza de tsunami por este terremoto” y que “no se requiere ninguna acción”.

Foto referencial: El sismo, conFoto referencial: El sismo, con epicentro frente a la isla de Cebú y a solo 10 kilómetros de profundidad, provocó escenas de pánico, evacuaciones y algunos daños estructurales

Filipinas se encuentra en el llamado “Anillo de Fuego” del Pacíficouna de las zonas con mayor actividad sísmica del mundo que se extiende desde Japón, pasando por el sudeste asiático, hasta la cuenca del Pacífico. Allí, los temblores son frecuentes y, aunque muchos son demasiado débiles para ser percibidos, los terremotos fuertes y destructivos ocurren de manera aleatoria y sin posibilidad de predicción.

El domingo, al menos 26 personas murieron y 33 resultaron heridas tras el impacto simultáneo de tres fenómenos meteorológicos sobre Filipinas: la tormenta tropical Opong, el supertifón Nando y la depresión tropical Mirasol. Según datos oficiales, las tormentas han afectado a 738.714 familias, es decir, cerca de 2,8 millones de personas. De este total, 163.317 personas pertenecientes a 46.611 familias tuvieron que ser evacuadas y realojadas en 2.680 centros de acogida habilitados en distintas regiones, informó el diario Phil Star.

Las autoridades han declarado el estado de calamidad en 53 zonas, lo que permite acceder a los fondos nacionales para desastres, cubrir gastos de asistencia y comenzar con las tareas de reconstrucción. Además, la medida contempla la congelación de precios de productos básicos para evitar la especulación en medio de la emergencia.

(Con información de AFP/EP)