Unos de los cargueros más grandes del mundo se quedó atravesado en el Canal de Suez y bloqueó todo el tránsito por el importante paso marítimo en Egipto, según dijeron las autoridades el miércoles, amenazando con interrumpir un sistema global de transporte de mercancías ya afectado por la pandemia del coronavirus.
El MV Ever Given, un buque con bandera de Panamá que transporta contenedores entre Asia y Europa, se quedó bloqueado en el canal.
En un primer momento no estaba claro qué había volteado el Ever Given en el canal. GAC, una compañía naviera y de logística global, describió que la embarcación sufrió un “apagón mientras transitaba con dirección al norte”, y no dio más detalles.
Evergreen Marine Corp., una importante naviera taiwanesa que gestiona el barco, dijo a The Associated Press en un comunicado que el Ever Given se había visto sobrepasado por los fuertes vientos a su entrada en el Canal de Suez desde el Mar Rojo, pero que ninguno de sus contenedores había caído al agua.
Un funcionario egipcio que habló con AP bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado a informar a la prensa también atribuyó el incidente al fuerte viento en la zona. La región sufrió vendavales y una tormenta de arena el martes, con vientos de hasta 50 kilómetros (31 millas) por hora, según meteorólogos egipcios.
“Toda la tripulación está a salvo y localizada”, dijo la compañía Bernhard Schulte Shipmanagemente, que gestiona el Ever Given. “No se han reportado heridos o contaminación”. La firma negó que el barco se hubiera quedado sin energía en ningún momento.
La proa del Ever Given estaba en contacto con el muro oriental del canal, mientras que la popa parecía haberse atascado con el muro occidental, de acuerdo con datos satelitales de MarineTraffic.com. Varios barcos de arrastre rodearon a la embarcación, intentando empujarla en la dirección correcta, según los datos.
Una imagen publicada en Instagram por un usuario a bordo de otro buque carguero parecía mostrar al Ever Given atorado en el canal, como indicaban los datos de satélite. Una topadora parecía trabajar junto a su proa, excavando en la arena para tratar de liberar al buque.
El tráfico en el estrecho que divide a África continental de la Península del Sinaí se detuvo el martes después de que el MV Ever Given, un buque de contenedores con bandera panameña y de propiedad japonesa, quedó varado.
El funcionario egipcio indicó que las remolcadoras intentarían reflotar el barco, una operación que llevaría al menos dos días. El buque quedó varado unos 6 kilómetros (3,7 millas) al norte del acceso sur del canal, cerca de la ciudad de Suez, en una zona del canal que es de vía única.
Eso podría tener un gran efecto dominó en el tráfico de mercancías entre el Mar Mediterráneo y el Mar Rojo, advirtió Salvatore R. Mercogliano, exmarino mercante y profesor asociado de historia en la Universidad Campbell de Carolina del Norte.
“Una media de 50 barcos atraviesa ese canal cada día, de modo que el cierre del canal supone que no hay ningún barco pasando al norte y al sur”, explicó Mercogliano a AP. “Cada día que el canal está cerrado (…) hay petroleros y mercantes que no entregan combustible, comida y artículos manufacturados a Europa, y productos que no se están exportando de Europa al Lejano Oriente”.
AP no logró contactar el miércoles por la mañana con las autoridades del canal.
El barco viajaba con destino final a Rotterdam, Holanda, antes de quedar atascado en el canal. Fue construido en 2018 y con una eslora de casi 400 metros (un cuarto de milla) y una manga de 59 metros (193 pies), es uno de los cargueros más grandes del mundo. Puede transportar unos 20.000 contenedores a la vez.
Inaugurado en 1869, el Canal de Suez brinda una importante vía para el tránsito de petróleo, gas natural y otros cargamentos de Oriente a Occidente. Alrededor del 10% del comercio mundial transita por el canal y sigue siendo uno de los mayores generadores de ingresos extranjeros de Egipto. En 2015, el gobierno del presidente Abdul Fatá el Sisi completó una enorme expansión del canal, lo que permite el paso de los barcos más grandes del mundo. El Ever Given quedó varado antes de llegar al tramo nuevo del canal.
El incidente del martes es una nueva complicación para los marinos en medio de la pandemia. Cientos de miles de trabajadores se han quedado atrapados en sus embarcaciones debido a las medidas contra el coronavirus. Al mismo tiempo ha aumentado la demanda de tráfico de mercancías, añadiendo la presión sobre marinos agotados, dijo Mercogliano.
“Es por el ritmo vertiginoso del tráfico global de mercancías ahora mismo, los mercantes tienen un calendario muy ajustado”, dijo. “Añadan a eso marinos que no han podido subir o bajar de los barcos debido a las restricciones del COVID”.