El gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cierra este lunes el año inmerso en un cierre parcial administrativo que provocó que una cuarta parte de sus funciones esté paralizada y que el sueldo de aproximadamente 800.000 empleados federales haya sido suspendido.
Trump, que canceló sus vacaciones de Navidad y de celebración de Año Nuevo para quedarse en Washington y tratar de solucionar el cierre administrativo, culpó a los congresistas demócratas por la paralización parcial de su Administración.
El presidente estadounidense pidió a los congresistas demócratas que regresen de sus vacaciones para votar a favor de más fondos para la seguridad fronteriza del país en el presupuesto y reactivar así las partes de la Administración que están cerradas.
“Estoy en el Despacho Oval. Demócratas, vuelvan de sus vacaciones ahora y dennos los votos necesarios para la seguridad de la frontera, incluyendo el muro. Ustedes votaron que sí en 2006 y 2013. Uno vez más, sí, pero conmigo al frente. ¡Lo construiré, y rápido!”, indicó Trump en Twitter.
El mandatario recordó que la idea de fortalecer la seguridad fronteriza mediante un muro fue una de sus promesas estrella durante la campaña electoral.
Aseguró que la construcción “correcta” de un muro en la frontera con México funcionará “casi al 100%” para evitar los flujos de inmigración ilegal y tráfico de drogas que pasan por el linde sur de EE UU.