El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha vuelto a arremeter este viernes contra la Administración del actual mandatario Joe Biden por su política que, a su juicio, ha conllevado a la actual crisis energética en el país norteamericano.
«Somos una nación que tiene mayores costes energéticos en la historia. Ya no somos independientes ni dominantes energéticamente como hace dos años. Somos una nación que mendiga petróleo a Venezuela, Arabia Saudita y muchos otros. ‘Por favor, por favor, por favor, ayúdenos’, dice Joe Biden», declaró el expresidente en un mitin celebrado en la ciudad de Waukesha (Wisconsin) para hacer campaña a favor de algunos candidatos republicanos, reseñó RT.
En paralelo, aludió a las estadísticas económicas que auguran una crisis en el país. «Somos una nación en declive. Somos una nación que está fracasando», manifestó Trump, al mencionar que hoy en día el país tiene la mayor tasa de inflación en unos 40 años, mientras que el mercado bursátil «acaba de terminar la peor mitad del año desde 1870».
Situación energética y económica en EE.UU.
En marzo, EEUU introdujo el embargo al petróleo ruso por el operativo militar en Ucrania. Luego, el país se ha enfrentado al alza de los precios de la gasolina que el pasado 14 de junio marcó su récord histórico tras situarse en los 5,016 dólares por término medio el galón, según los datos de la Asociación Estadounidense del Automóvil (AAA). Actualmente, el índice a nivel nacional es de 4,084 dólares por unidad.
Para paliar la crisis, Washington emprendió una serie de medidas. En particular, autorizó en mayo a las petroleras estadounidenses y europeas para que «negocien y reinicien operaciones» con Venezuela tras años de sanciones contra el país suramericano. Por otra parte, durante la visita de Biden a Arabia Saudita en julio pasado, desde Riad anunciaron que incrementarán la capacidad de producción diaria de crudo hasta 13 millones de barriles, pero solo para el 2027, después de lo cual ya no habrá tal posibilidad.
En cuanto al estado económico, los altos funcionarios estadounidenses, incluido el actual presidente, declararon en varias ocasiones que el país no está en recesión. Sin embargo, el pasado 28 de julio la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio informó que el producto interior bruto (PIB) del país se contrajo un 0,2 % en el segundo trimestre de 2022 respecto a los tres meses anteriores, lo que técnicamente constituye un indicador informal de recesión económica.