En un giro inesperado en la investigación del asesinato de Valeria Márquez, la joven influencer mexicana que fue asesinada mientras transmitía en vivo por TikTok, una mujer que asegura haber presenciado el atentado ha declarado que no fue el repartidor quien disparó, sino Erika, la empleada del salón de belleza donde ocurrieron los hechos.
Esta versión contrasta con la hipótesis inicial que apuntaba al repartidor como el agresor. La información fue obtenida del portal web de El Tiempo, donde se detalla que la testigo, identificada con el seudónimo “Paola” por temor a represalias, se encontraba revisando la lista de precios en la estética cuando ocurrió el crimen.
Según su relato, Erika, quien estaba sentada junto a Valeria, fue quien sacó un arma y disparó contra la influencer, mientras el repartidor solo estaba sacando algo de su mochila.
La testigo planea acudir a la Fiscalía de Jalisco para formalizar su declaración, en medio de una investigación que sigue bajo protocolo de feminicidio con perspectiva de género y respeto a los derechos humanos.
Las autoridades continúan analizando videos, testimonios y otros indicios para esclarecer los hechos. Por su parte, la defensa de Erika mantiene que ella no tuvo participación en el crimen y que solo cumplía funciones laborales en el momento del ataque.
El gobernador de Jalisco, Pablo Lemus Navarro, ha informado que más de 20 personas del círculo íntimo de Valeria han sido interrogadas y que existen tres líneas de investigación en curso, descartando vínculos con grupos ilegales.