«Hoy puedo confirmar que tropas norcoreanas han sido enviadas a Rusiay que han sido desplegadas en la región (rusa) de Kursk», afirmó el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, en una declaración posterior a la visita de una delegación de alto nivel de Corea del Sur para informar a la Alianza sobre esa materia.
La OTAN pidió a Rusia y Corea del Norte que pongan fin «inmediatamente» al despliegue de soldados norcoreanos en territorio ruso para apoyar a Moscú en la guerra contra Ucrania.
Según Rutte, el refuerzo de la cooperación militar entre Rusia y Corea del Norte representa una amenaza para la seguridad de la región del Indo-Pacífico y Euro Atlántica. En opinión del alto funcionario, el despliegue de soldados norcoreanos en territorio ruso es también una muestra de la «desesperación» del presidente ruso, Vladimir Putin.
«Más de 600.000 soldados rusos han muerto o han sido heridos en la guerra de Putin, y él no está en condiciones de mantener su ataque contra Ucrania sin apoyo extranjero”, indicó Rutte en Bruselas. El número de víctimas citadas por la OTAN se ha duplicado en aproximadamente un año.