Jack Lew mantuvo una conversación telefónica con el primer ministro griego en la que pidió al país heleno un pacto constructivo que permita hacer reformas fiscales, difíciles, pero necesarias
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Jack Lew, mantuvo este martes una conversación telefónica con el primer ministro de Grecia, Alexis Tsipras, en la que le trasladó el interés de EE UU en que el país heleno y sus acreedores retomen el diálogo en busca de un acuerdo.
En un comunicado, el departamento del Tesoro informó de la conversación telefónica entre Lew, Tsipras y el nuevo ministro de Finanzas griego, Euclidis Tsakalotos, a quienes dijo que EE UU espera un retorno al diálogo del que surja un «pacto constructivo que permita Grecia hacer reformas fiscales difíciles pero necesarias».
Lew también explicó al dirigente griego y a su responsable de Finanzas que el Tesoro de EE UU «monitoriza de cerca» la situación en Grecia y les ofreció «seguir en contacto cercano durante los próximos días».
También el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su homólogo francés, Fraçois Hollande, mantuvieron una conversación telefónica en la que trataron la situación en Grecia.
Estados Unidos reiteró que «las necesidades» de la economía helena siguen siendo «las mismas» tras el referendo de Grecia del domingo, por lo que urgió a «un compromiso» entre Atenas y los acreedores internacionales para alcanzar un paquete de reformas y financiación.
«El referendo pasó, y nuestra visión no cambió. Grecia debe seguir en la zona euro (…), pero necesita un paquete de reformas y financiación, las necesidades siguen siendo las mismas», afirmó Josh Earnest, portavoz de la Casa Blanca, en su rueda de prensa diaria.
En las primeras declaraciones del gobierno tras la amplia victoria del «no» en el referendo de este domingo en Grecia frente a las recetas de austeridad propuestas por los acreedores internacionales, Earnest indicó que EE UU sigue apuntando que «es en el interés de todas las partes alcanzar un acuerdo», pero subrayó que «es un desafío particularmente europeo».
Durante las últimas semanas, Washington recalcó ante los líderes europeos que el paquete de reformas estructurales debe ir acompañado por un alivio de la deuda griega, algo sobre lo que países como Alemania y Holanda se mostraron recelosos. EFE