Autoridades antinarcóticos dominicanas desmintieron hoy que dos parientes del presidente venezolano, Nicolás Maduro, detenidos en Haití y enviados a Estados Unidos acusados de tráfico de drogas, tengan vinculación con el decomiso reciente de un alijo de cocaína en el país.
La Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) rechazó “categóricamente” que el capitán del yate donde las autoridades dominicanas decomisaran 54 kilos de cocaína y cuatro de heroína, fuera reclamado como testigo por la Agencia Antidroga de EEUU (DEA, en inglés), en el caso de los venezolanos Efraín Antonio Campo Flores y Francisco Flores de Freitas, sobrinos de la primera dama de Venezuela, Cilia flores.
El organismo agregó, que hace las precisiones “en vista de que un diario local, al parecer se ha dejado confundir al hacerse eco de datos manipulados y publicados por un periódico español que hizo alusión del caso con datos totalmente erróneos” y aclaró que los jóvenes venezolanos arrestados en Haití “no guardan ningún tipo de vinculación” con el decomiso de la droga en el yate anclado en un complejo turístico de La Romana (este).
“Tampoco es cierto que ese capitán permaneciera bajo la protección de la agencia estadounidense (DEA)”, informó la DNCD.
La DNCD expresó, además, “que tampoco son ciertas versiones periodísticas difundidas que señalan el decomiso de 80 paquetes de drogas en una propiedad del complejo turístico donde las autoridades se incautaron de los 58 kilos de cocaína y heroína”, el ocho de noviembre pasado.
La oficina antidroga local recordó que durante la operación realizada en el yate fueron apresadas seis personas de nacionalidad dominicana, “información que se dio a conocer a pocas horas de la agencia llevar a cabo el allanamiento en la embarcación, no cuatro días después como publicara el diario (dominicano) en cuestión”.
Campo Flores y Francisco Flores de Freitas fueron detenidos el 10 de noviembre en Haití y trasladados a Nueva York por agentes de la DEA bajo acusaciones de narcotráfico.
La fiscalía de esa ciudad los acusa de confabularse con otras personas para introducir al menos cinco kilos de droga en Estados Unidos a través de Honduras, y se enfrentan a una pena máxima de cadena perpetua en caso de ser encontrados culpables.
Campo Flores, de 29 años, y Flores de Freitas, de 30, tuvieron su primera comparecencia el pasado 12 de noviembre, y el juez ordenó su ingresó en prisión sin fianza y desde entonces permanecen en el penal federal Metropolitan Correctional Center.
Hasta el momento, ni el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ni la primera dama, Cilia Flores, han hablado sobre las detenciones, pero el presidente del Parlamento venezolano, el oficialista Diosdado Cabello, calificó de “secuestro” la captura de ambos. EFE