El director de Inteligencia y Contrainteligencia de las Fuerzas Militares de Colombia, brigadier general Oswaldo Peña Bermeo, renunció a su cargo tras la polémica por las cuestionadas fotos con las que el Gobierno acusó ante la ONU al régimen de Nicolás Maduro de proteger al ELN.
«El brigadier general Oswaldo Peña Bermeo (…) ha presentado comunicación dirigida al señor presidente de la República mediante la cual solicita su retiro del servicio activo», afirmó el Ministerio de Defensa en un escueto comunicado.
La cartera señaló que Peña argumentó que es «consciente de la necesidad de responder por mis actos y la de mis subalternos», por lo que decidió actuar «en consecuencia» si bien no dio más detalles acerca de las razones por las que tomó la decisión.
El pasado miércoles el presidente colombiano, Iván Duque, en su intervención ante la Asamblea General de la ONU, denunció que el régimen de Venezuela hace parte de la cadena del «terrorismo transnacional» puesto al servicio de distintos grupos armados ilegales.
En esa oportunidad el mandatario exhibió un informe de 128 páginas que luego entregó al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, sobre el supuesto apoyo de Maduro a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y otros grupos armados ilegales, documentado con coordenadas geográficas, fotografías y extractos de conversaciones, entre otros datos.
Sin embargo, el jueves el diario El Colombiano afirmó que una foto con la que Duque denunció la «penetración del ELN en escuelas» de Venezuela no correspondía ni al lugar ni a la fecha señalada en el documento.
El rotativo manifestó que obtuvo de Inteligencia Militar la fotografía en la que aparecen guerrilleros jugando con niños en junio de 2015 para realizar un artículo sobre reclutamiento en escuelas rurales del departamento del Cauca, en el suroeste de Colombia.
Al respecto, el comandante general de las Fuerzas Militares, general Luis Navarro, dijo el pasado viernes que la fotografía la tomaron «como una referencia» que les dio la ONG venezolana Fundación Redes (Fundaredes) y que la usaron «simplemente» para «hacer énfasis en el informe».
Posteriormente la agencia AFP aseguró que otras dos fotografías incluidas en el documento entregado a la ONU eran suyas y aclaró que no habían sido tomadas en Venezuela sino en Colombia.
El Gobierno ha minimizado el mal uso de las fotografías puesto que asegura que se utilizaron como contexto de la denuncia y defiende que eso no debe desviar la atención del problema que supone la protección de Venezuela al ELN y las disidencias de las FARC.
El canciller, Carlos Holmes Trujillo, y el ministro de Defensa, Guillermo Botero, así como el fiscal general, Fabio Espitia, y la cúpula militar y policial, dieron una rueda de prensa este lunes para insistir en la protección que Maduro da al ELN.
Trujillo afirmó que «lo que importa es la gravísima amenaza del régimen de Maduro a la paz de Colombia y de la región», por lo que «no se puede desviar la atención de lo principal a lo accesorio».
Por su parte, Botero agregó al presentar nuevas pruebas de miembros del ELN en Venezuela que a los guerrilleros en ese país «no los persiguen ni los tratan como delincuentes» y que por el contrario allí se «entrenan» para planear «la ejecución de atentados contra ciudadanos y activos estratégicos de Colombia», reseña EFE