Reino Unido: 8 años de cárcel para una mujer que abusó de su amiga con un órgano falso

Gayle Newland se disfrazó de hombre antes de mantener relaciones, al menos 10 veces, con una joven que había contactado en Facebook. Un juez condenó el «efecto devastador» que dejó en la víctima

Ha sido un pena inusual, tan alta que sorprendió incluso a la propia víctima. Gayle Newland pasará 8 años en la cárcel por simular ser un hombre ante una amiga con la que mantuvo relaciones sexuales.

Un tribunal de Chester consideró que la joven, de 25 años, había cometido una violación basada en identidades falsas, disfraces que ocultaban sus senos y hasta una prótesis peneana.

Todo comenzó en 2011, cuando Newland, hoy de 25 años, se hizo amiga de la víctima en la red social Facebook. Usó para ello un nombre de perfil de varón: Kye Fortune. Las dos mujeres pasaron entonces a hablar por teléfono y Newland siguió haciéndose pasar por hombre.

Finalmente, acordaron reunirse cara a cara en 2013. Newland insistió en que la otra mujer, que no puede ser identificada por razones legales, se vendara los ojos para el encuentro.

Gayle Newland obligaba a la víctima a llevar los ojos vendados. Pero dijo en su defensa que la joven siempre supo que trataba con una mujer

Pasaron más de 100 horas juntas, en las que la víctima siempre llevó los ojos vendados, incluso para mirar la televisión juntas y tomar el sol.

La pareja tuvo relaciones sexuales alrededor de 10 veces hasta que la mujer se quitó la venda y vio que Newland llevaba una prótesis peneana.

NEWLAND SIEMPRE OBLIGÓ A SU VÍCTIMA A LLEVAR LOS OJOS VENDADOS

Newland, de Willaston, Cheshire, en el noroeste de Inglaterra, afirmó que la víctima siempre supo que fingía ser un hombre y que se dedicaban a juegos de rol para explorar su sexualidad. Insistió, además, en que no ocultó sus pechos ni usó sombrero para taparse la cara, como se dijo en el proceso.
Su defensa, en tanto, argumentó que era «imposible de creer» que una joven con experiencia sexual creyese realmente que había tenido relaciones sexuales con un hombre.
«Usted fue tan convincente en su engaño que la víctima pensó que al fin había encontrado a un hombre a quien podía amar», le dijo el juez a Gayle Newland.
Pero el juez Roger Dutton no les creyó y aplicó una durísima condena. También describió a Newland como una mujer «mentirosa, intrigante y muy determinada».
«Usted fue tan convincente en su engaño que la víctima pensó que al fin había encontrado a un hombre a quien podía amar«, le dijo Dutton a la condenada.
La acusó además de actuar sólo para satisfacer su propia ambición sexual. «Mantuvo esta línea de conducta durante un largo –le dijo–, período en el que jugó con sus sentimientos, actuando únicamente para su propia satisfacción sexual, sin tener en cuenta el impacto devastador que el descubrimiento de la verdad tendría» en la víctima.
Al escuchar la sentencia, Newland comenzó a llorar y a gritar sin consuelo, tanto que tuvo que ser sacada por la policía a la rastra. Los gritos de la mujer se escucharon incluso cuando ya se encontraba en el pasillo, relata el diario británico The Mirror.