Curaçao Refinery Utilities (CRU) vendió cerca de 500.000 barriles de fueloil que se encontraban almacenados en los tanques de Bullenbaai, evitando la tercera subasta que estaba prevista realizarse durante el mes de febrero de 2024.
Según publicó Crónicas del Caribe, hasta el momento no se sabe quién adquirió el hidrocarburo, pero estiman que pudieron ser las empresas Lead World Group o Global Oil, esta última que tiene un contrato con la Refinería di Kòrsou (RdK) para la producción de asfalto.
Cabe resaltar que un informe del medio internacional Associated Press (AP) destacó que el fueloil que estaba en la refinería de Curazao era considerado como «contrabando», dado que presuntamente eludió las sanciones de la OFAC, por lo que este combustible al parecer pertenecía a Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA).
La primera y segunda subasta
El pasado 1 de noviembre de 2023, se realizó la primera subasta para vender el fueloil, con la intención de obtener US$ 8 millones que la empresa Caribbean Petroleum Refinery (CPR) le debía a Curaçao Refinery Utilities (CRU) por el alquiler de los depósitos en Bullenbaai.
La empresa I&E Petroleum Group, ubicada en Willemstad, adquirió el combustible por US$ 28,6 millones. No obstante, esta compañía nunca realizó el depósito del dinero.
En la segunda subasta para vender el hidrocarburo, la firma Count Energy ofreció 28,5 millones de dólares, pero tampoco cumplió con la transferencia de los recursos.
Tras estos incumplimientos, se organizó una tercera subasta que estaba prevista para el pasado 14 de febrero de 2024, la cual fue suspendida porque fue vendido el fueloil de «forma privada».
Fuentes cercanas al Gobierno de Curazao indicaron que la venta del combustible se efectuó y la compañía Curaçao Refinery Utilities obtuvo alrededor de US$ 10 millones.
Llegada del buque cisterna
Los trabajadores de la Curaçao Refinery Utilities quedaron sorprendidos al ver llegar al buque cisterna que cargaría el fueloil.
Los empleados de la refinería tenían la instrucción de conectar la bomba al tanque en donde se encontraba el combustible.
Cabe acotar que el muelle donde encalló el buque tenía líneas de fuga, por lo que tuvo que movilizarse a otro espacio, con la intención de solventar el problema.