Un informe elaborado por la Red Nacional de Organizaciones Migrantes y Pro Migrantes difundido este viernes concluye que los extranjeros que se encuentran desde hace días varados en la frontera entre Chile y Perú «quedan en el limbo» entre los dos países.
«La única opción que tienen es pasar durante la noche por pasos no habilitados a territorio peruano, pagando lo que les cobren», resalta el informe.
El documento, que suscriben observadores de cuatro organizaciones distintas que pasaron varios días sobre el terreno recogiendo testimonios. «Estar atrapados entre las dos fronteras obliga a los migrantes a pasar caminando por el desierto, incluso hasta seis horas en altas horas de la noche, expuestos a redes de tráfico y peligros mortales es un periplo que enfrentan incluso mujeres embarazadas, niños y adolescentes».
En el último tiempo, muchos migrantes que se encontraban en Chile en situación irregular decidieron salir del territorio o regresar a sus países en búsqueda de otras oportunidades. Muchos no lograron regularizar su situación, lo que les impide trabajar en condiciones dignas.
En su ruta de retorno, se encontraron con restricciones al ingreso de Perú. Este miércoles el país declaró Estado de Emergencia en sus fronteras, y llevan días varados.
Los autores del informe destacan la «falta de una mirada humanitaria de la situación. Así como un abordaje político que considere el valor de la vida de estas personas, dejadas al abandono y cuyo control se ha hecho de manera violenta». Explican que la forma de abordar el problema por parte de la Policía chilena «es a partir de la criminalización».
Piden corredor humanitario para migrantes
La Red de Organizaciones Migrantes y Pro Migrantes instó al Estado a «promover un corredor seguro para la migración venezolana que desea retornar a su país». Es una propuesta que este viernes respaldó públicamente el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, y el presidente de la Cámara de Diputados, Vlado Mirosevic.
“Los acuerdos son necesarios con Perú, Ecuador y Colombia para contribuir a su rápida concreción. En relación a las personas de otras nacionalidades que deseen abandonar el país, el Gobierno debe ser coherente y permitir su movilidad. Esto evitaría los malos tratos o condiciones críticas en zonas en las que quedan varados”, agregaron.
Para las ONGs, «las políticas criminalizadoras de la migración han hecho invivible permanecer en Chile».
La crisis
El foco político del conflicto escaló este jueves después de que el alcalde de la localidad fronteriza peruana de Tacna, Pascual Güisa, tildara al presidente de Chile, Gabriel Boric, de «irresponsable». Además, lo acusó de » trasladar el problema (migratorio) a la frontera».
Según Amnistía Internacional (AI), al menos 300 personas, la mayoría de ellas de nacionalidad venezolana y haitiana, se encuentran varadas en la frontera entre ambos países. Calificó el hecho como «una situación humanitaria crítica. Están «sin alimentos, agua, alojamiento o asistencia sanitaria en el desierto conocido por sus condiciones extremas». EFE