La vida empezaba a volver a la normalidad el miércoles tras dos meses de cuarentena en Hubei, el epicentro de la pandemia de coronavirus en China, luego de que se levantaran los controles de tráfico, se reactivaran las obras de construcción y las personas volvieran a tomar buses y trenes en la provincia.
China continental también informó el martes sobre una caída en los nuevos casos confirmados de coronavirus a 47, todos ellos en viajeros que regresaban a casa, en comparación con las 78 infecciones nuevas reportadas un día antes.
Hubei, una provincia central de China que alberga a unas 60 millones de personas, anunció el martes que eliminaría las restricciones de viaje a partir de la medianoche.
“Reservé mi boleto esta mañana después de escuchar las noticias”, dijo Chen Ting, quien estaba acompañada por su hijo de tres años y se encontraba entre unas 40 personas que bajaron de un tren en la ciudad de Xianning, en Hubei.
La joven de 28 años había llegado desde Qingyuan, en la provincia sureña de Cantón, donde dirige un negocio de ventas al por mayor. El coronavirus la forzó a cancelar sus planes de visitar a sus padres en febrero, después del Año Nuevo Lunar.
“Estoy desesperada por volver a casa para verlos a todos”, dijo mientras esperaba que su padre los recogiera y condujera a la casa familiar en la cercana ciudad de Huangshi.
El miércoles por la noche en Xiangang, los residentes se paseaban por las calles cargando víveres, mientras los restaurantes solo servían comida para llevar. Los altavoces emitieron promociones “como compre uno y llévese otro gratis”. Todos llevaban máscaras.
La cuarentena obligatoria de la capital de Hubei, Wuhan, se levantará el 8 de abril, un hito en la guerra de China contra la epidemia, a medida que Pekín cambia su estrategia para detener los casos importados y reactivar su paralizada economía.
En Wuhan también había señales de que la vida normal volvería. Grupos de hombres con máscaras protectoras trabajaban en un puente al reanudarse los proyectos de construcción, y los residentes saludaban desde las ventanas de sus apartamentos mientras un equipo médico se preparaba para abandonar la ciudad.
El Gobierno de Hubei dijo el miércoles a los trabajadores que habían sido puestos en cuarentena en sus hogares que volvieran a sus labores lo antes posible. El parque de las montañas de Wudang, un importante sitio turístico del sector, fue reabierto a los visitantes.
El secretario del Partido Comunista en Hubei, Ying Yong, dijo que el Gobierno continuaría trabajando duro para evitar un repunte de las infecciones a medida que va incrementándose el flujo de traslados entre la población.
Los viajeros que llegaron a Xianning fueron sujetos a controles de unos 30 minutos y se les pidió que mostraran “códigos de salud” en sus teléfonos móviles que demostraran que no habían estado en un área de alto riesgo en los últimos 14 días.