Estados Unidos aseguró en agosto pasado que suavizará el régimen de sanciones sobre el sector petrolero de Venezuela, permitiendo que más empresas y países importen su crudo, si el gobierno de Nicolás Maduro realiza reformas que lleven a la celebración de elecciones libres y justas.
El primer ministro de Trinidad y Tobago, Keith Rowley, encabezará el jueves una delegación de altos funcionarios locales a la Asamblea General de la ONU, donde se expresará sobre el conflicto político entre Venezuela y Estados Unidos.
Sobre el conflicto político, Estados Unidos aseguró en agosto pasado que suavizará el régimen de sanciones sobre el sector petrolero de Venezuela, permitiendo que más empresas y países importen su crudo, si el gobierno de Nicolás Maduro realiza reformas que lleven a la celebración de elecciones libres y justas.
Estados Unidos ya había dejado claro su postura en relación al levantamiento de sanciones a cambio de reformas democráticas, pero consideró oportuno reiterar esta posición a medida que se acercan las presidenciales de Venezuela programadas para 2024.
En rueda de prensa este miércoles, Rowley dijo que se dirigirá por primera vez al cuerpo desde 2019, pero que esta vez irá más confiado después que Dennis Francis, un veterano diplomático de Trinidad y Tobago, fue elegido como presidente de la Asamblea General de la ONU para su próximo periodo de sesiones.
El nombramiento de Francis, que era el candidato de consenso del grupo de Latinoamérica y el Caribe y el único que concurría a estas elecciones, fue aprobado por aclamación por los 193 Estados miembros de la organización.
«Pensábamos que teníamos que pelear por ese puesto, por lo que estábamos listos para la batalla. Pero, finalmente, fuimos apoyados unánimemente», dijo Rowley.
«Es uno de los grandes logros que ha obtenido Trinidad y Tobago, diplomáticamente hablando», reconoció.
La delegación política trinitense incluirá al ministro de Salud, Terrance Deyalsingh, quien irá a la ONU, pues según dijo Rowley «el próximo gran asunto mundial será lidiar con la siguiente pandemia».
Rowley dijo además que una de las políticas de su administración es que Trinidad y Tobago mantenga un alto perfil en diplomacia y asuntos de naturaleza internacional donde sí tienen intereses significativos.
«Y es por eso que mantendremos nuestra presencia e intervención en algunas de estas reuniones de gran importancia en la ONU». EFE