El mundo contabiliza casi 16 millones de casos confirmados al nuevo coronavirus y lamenta el deceso de unas 640.000 personas a causa de la covid-19, sin que la pandemia muestre signos de desaceleración a escala global, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), reseña Telesur.
En la conferencia de prensa correspondiente a este lunes, el director general de la OMS, doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, resaltó que la emergencia sanitaria mundial sigue un curso acelerado, cuando el próximo jueves se cumplen seis meses de su declaración como pandemia.
“Cuando declaré una emergencia de salud pública de interés internacional (…) había menos de 100 casos fuera de China, y ninguna muerte (…) En las últimas seis semanas, el número total de casos se ha duplicado aproximadamente”, fueron parte de las palabras de Tedros.
El especialista dio a conocer que convocará nuevamente al Comité de Emergencia a finales de esta semana para reevaluar la pandemia y recibir consejo en consecuencia, tal como está previsto en el Reglamento Sanitario Internacional.
Ghebreyesus también recordó que este martes se celebra el Día Mundial de la Hepatitis, enfermedad que, según sus palabras, afecta a 325 millones de personas en todo el mundo y cada año provoca el deceso de alrededor de 1.300.000 personas.
"As we mark 6 months since the declaration of the global health emergency, the #COVID19 pandemic is illustrating that health is not a reward for development, it’s the foundation of social, economic and political stability"-@DrTedros
— World Health Organization (WHO) (@WHO) July 27, 2020
Lamentó que el covid-19 ha detenido los avances en el logro de los objetivos internacionales de reducción de la hepatitis ya que, por la pandemia, “se han interrumpido los servicios de prevención, pruebas y tratamiento, se han interrumpido las cadenas de suministro, se han desviado los limitados recursos financieros y humanos y el enfoque político se ha desplazado hacia la contención de la pandemia y la recuperación económica”.
Tedros llamó a la comunidad internacional a garantizar la inclusión y el acceso a los tratamientos, tanto para el covid-19 como para la hepatitis, superando la falta de atención que la actual pandemia ha generado sobre los otros problemas sanitarios que afectan al mundo.
“Al cumplirse seis meses de la declaración de la emergencia sanitaria mundial, la pandemia de covid-19 ilustra que la salud no es una recompensa para el desarrollo, sino la base de la estabilidad social, económica y política. No somos prisioneros de la pandemia”, concluyó.