El reconocimiento del jefe del Parlamento de Venezuela, Juan Guaidó, como presidente encargado, no generó consenso en la OEA, donde un grupo de 16 países apoyaron una declaración a su favor, de la cual se restaron más de la mitad de los miembros, como México, que pidió revisar el estatus jurídico del nombramiento.
En una reunión extraordinaria del Consejo Permanente para analizar la crisis en Venezuela, un grupo de 16 países, entre ellos Argentina, Canadá, Brasil, Estados Unidos, se pronunciaron a favor de Guaidó en su pulso por el poder con el mandatario Nicolás Maduro.
La sesión contó con la participación del jefe de la diplomacia estadounidense, Mike Pompeo, un día después de que Washington, junto a una decena de países americanos, entre ellos Brasil, Colombia y Argentina, reconocieran la autoproclamación de Guaidó como presidente encargado.
«Ahora llegó la hora de que la OEA como institución haga lo mismo», dijo Pompeo en la sesión.
Para el jefe de la diplomacia estadounidense «el tiempo del debate acabó». «El régimen del expresidente Nicolás Maduro es ilegítimo», dijo.
«Esta quebrado moralmente, es económicamente incompetente, profundamente corrupto y es antidemocrático en su esencia», añadió.
El Departamento de Estado anunció que Estados Unidos prepara un paquete de ayuda de 20 millones de dólares para Venezuela para ser entregado «en cuanto sea posible logísticamente», en respuesta a una petición hecha por la Asamblea Nacional presidida por Guaidó.
El discurso de Pompeo fue interrumpido por una activista de la organización Code Pink, que levantó una pancarta que rezaba «OEA no apoyes un golpe de Estado en Venezuela» antes de ser evacuada de la sala.
El segundo periodo del gobierno de Maduro, iniciado el 10 de enero tras unas elecciones consideradas «fraudulentas» por la oposición, no ha sido reconocido por gran parte de la comunidad internacional.
El secretario general de OEA, Luis Almagro, felicitó el miércoles a Guaidó, casi inmediatamente después de que éste se autoproclamara presidente interino.
La sesión en la OEA fue convocada el martes, previo a la autoproclamación de Guaidó, a solicitud de las misiones permanentes de Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Estados Unidos y Perú.
– Aclarar el estatus jurídico de Guaidó –
La declaración de los países que apoyaron a Guaidó pidió que se «garantice la seguridad y la protección del presidente encargado, Juan Guaidó, y de los miembros de la Asamblea Nacional».
«Reitero nuestras amenazas sobre cualquier decisión de los elementos remanentes del régimen de Maduro sobre el uso de la violencia para reprimir una transición política», advirtió Pompeo, en un momento en que, según la ONG Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS), los disturbios en medio de las protestas contra Maduro han dejado 26 muertos.
Almagro expresó en Twitter su apoyo a la declaración, a pesar de que ésta no contó con el apoyo unánime de los 34 miembros activos de la organización.
El representante mexicano, Jorge Lomónaco, cuyo gobierno reconoce a Maduro, pidió durante la sesión que la OEA aclare «el estatus jurídico derivado de la designación del presidente encargado nombrado por la Asamblea Nacional de Venezuela y las muestras de reconocimiento y apoyo internacionales que ha recibido».
La representante de Venezuela en la OEA, Asbina Ixchel Marin, rechazó la declaración, destacando que no tiene el consenso de todos los Estados de la organización.
«No es una declaración de la OEA, es un simple panfleto. No se puede engañar a la opinión pública. Es una operación de propaganda que intenta justificar el golpe de Estado», afirmó.
– «Aprender lecciones del pasado» –
En el tema de Venezuela, Trump ha contado con el inusual apoyo del Partido Demócrata. Pero este jueves el senador independiente Bernie Sanders, que compitió por la nominación como candidato de los demócratas para las presidenciales en 2016 llamó a «aprender lecciones del pasado y a no jugar en la dinámica de cambios de regímenes o de apoyar golpes de Estado».
«Estados Unidos tiene una larga historia de haber intervenido de una forma inapropiada en países de América Latina, tenemos que evitar tomar nuevamente ese camino», dijo citando casos como el de Chile en 1973.
Venezuela, el país con las mayores reservas petroleras del mundo, está sumido en una grave crisis política y económica que ha obligado a 2,3 millones de personas a abandonar el país desde 2015, según la ONU.
La crisis ha provocado escasez de alimentos y medicinas y, según el Fondo Monetario Internacional (FMI), la inflación en 2019 alcanzará 10.000.000%.
El día que Maduro asumió su segundo periodo, la OEA aprobó una resolución para declarar «ilegítimo» su mandato.
Venezuela ha sido amenazada en varias ocasiones sin éxito con ser suspendida de la OEA. En paralelo el gobierno de Maduro planea completar su retiro del organismo multilateral en abril.