Dos migrantes venezolanos, Orimar Adellan Fumero y su novio Adrián, murieron en Tenerife, en las Islas Canarias de España, en accidentes de motocicleta ocurridos con menos de 24 horas de diferencia.
Orimar Adellan Fumero, de 34 años, perdió la vida el viernes 26 de diciembre a las 18:09 horas en la autopista del sur (TF-1), a la altura del Polígono Industrial de Granadilla de Abona, al colisionar con un autobús, reportaron medios locales
Los bomberos del Consorcio de Tenerife la liberaron tras quedar atrapada bajo el vehículo, pero los servicios de emergencias confirmaron que las lesiones eran incompatibles con la vida.
Menos de 18 horas después, Adrián, de 28 años, falleció en otro accidente en la carretera TF-65, kilómetro 3,9, en San Miguel de Abona. Según reportes de la Guardia Civil, un conductor que se saltó un stop y dio positivo por alcohol y drogas arrolló a Adrián mientras él circulaba en su motocicleta. El responsable del accidente fue detenido.
La pareja compartía una gran pasión por las motocicletas y los animales, aficiones que los habían unido hace unos dos años. Ambos procedían de familias venezolanas que emigraron a Tenerife en busca de mejores oportunidades, vinculándose con la comunidad de retornados y migrantes en el Archipiélago.
Orimar había nacido en Caracas y se trasladó a Tenerife con su familia a los 9 años. A pesar de sus aspiraciones de estudiar veterinaria, la joven se dedicó a trabajar en diversas empresas, incluido un tiempo en Galicia y su último empleo en una tienda naturista del sur de la isla.
Sus amigos y familiares la recuerdan como una mujer optimista, luchadora y amante de los animales. Adrián, por su parte, se dedicaba a la cría de halcones y compartía con Orimar su pasión por las motos.
El fallecimiento de ambos ha generado una ola de conmoción entre la comunidad de motociclistas de Tenerife, que prepara homenajes en su memoria. Con estos dos casos, el año 2025 registra 34 muertes en accidentes de motos en Canarias.
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