El Ejército de Arakan, el Ejército de Liberación Nacional Taang y el Ejército de la Alianza Democrática Nacional de Myanmar enviaron este martes un ultimátum a la junta militar en el que amenazan con anular su acuerdo de alto el fuego si continúa la matanza indiscriminada de manifestantes. Más de 500 personas han muerto desde el 1 de febrero.
Tres de los principales grupos étnicos armados de Myanmar están dispuestos a romper con el acuerdo de alto el fuego pactado con la junta militar que gobierna actualmente al país asiático.
Se trata del Ejército de Arakan, el Ejército de Liberación Nacional Taang y el Ejército de la Alianza Democrática Nacional de Myanmar. Los grupos firmaron un comunicado conjunto en el que advirtieron al Ejército birmano de colaborar con los manifestantes en las protestas de la llamada ‘Revolución de la primavera’ si las tropas no detienen sus acciones violentas en las calles.
“Estoy encantado y agradecido con nuestros hermanos y hermanas (…) por mostrar una vez más un liderazgo fuerte contra este régimen brutal e ilegítimo de Myanmar”, dijo en Twitter Dr. Sasa, portavoz del autodenominado “gobierno legítimo” formado por un pequeño grupo de diputados electos.
El portavoz insistió en que se declare a la junta militar como organización terrorista, que se corten todas sus fuentes financieras, armas, y que se juzgue a los generales de la junta en la Corte Penal Internacional de La Haya.
Hace dos semanas, este grupo denominado Comité de Representantes de la Asamblea de la Unión (CRPH) pidió a los grupos étnicos armados del país “unir fuerzas” contra la junta golpista.
Myanmar vive una profunda crisis desde el 1 de febrero, cuando los militares derrocaron al gobierno electo encabezado por la premio nobel de paz Aung San Suu Kyi. La mujer fue detenida y la junta impuso un gobierno militar después de una década de intentos de tener una democracia.
El Ejército justificó el golpe diciendo que las elecciones de noviembre ganadas por el partido de Suu Kyi fueron fraudulentas, una afirmación desestimada por la Comisión Electoral.
Desde entonces, al menos 512 personas han perdido la vida durante las protestas contra el golpe militar. De esta cifra, 141 murieron el sábado 27 de marzo, el día más sangriento de los disturbios, según el grupo de defensa de la Asociación de Asistencia a Presos Políticos (AAPP).
Durante el fin de semana, varios aviones militares de Myanmar bombardearon a insurgentes de la etnia karen, por lo que cerca de 3.000 personas huyeron a Tailandia. Más tarde, el Gobierno de este país negó las acusaciones de algunos manifestantes de que los refugiados estaban siendo obligados a regresar, incluso, un funcionario tailandés dijo que el Ejército le estaba diciendo a las personas que regresaran a Myanmar porque se consideraba seguro de ese lado de la frontera. Sin embargo, a más de una docena de personas se les permitió cruzar a Tailandia para recibir tratamiento médico, dijeron testigos a Reuters.
A pesar del sangriento fin de semana, este martes se siguen registrando las llamadas «huelgas de desobediencia civil» que han paralizado varios sectores de la economía. Los manifestantes piden a la gente que tiren basura en las calles, con el fin de intensificar la presión.
Un golpe militar criticado por la comunidad internacional
La comunidad internacional ha condenado repetidamente la violencia en Myanmar y ha pedido la liberación de Aung San Suu Kyi. Incluso, varios países han impuesto sanciones limitadas. Pero las críticas y las sanciones extranjeras no han logrado cambiar nada.
Por su parte, los países asiáticos vecinos de Myanmar han sido más cautelosos en lo que han dicho respecto a la crisis en este país.
“Indonesia denuncia enérgicamente este tipo de actos. Es inaceptable», dijo el ministro de Relaciones Exteriores, Retno Marsudi, durante una visita a Japón.
Indonesia lidera los esfuerzos de los miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) conformada por 10 países, incluido Myanmar, para alentar una solución negociada. “Respetando continuamente el principio de no interferencia, desde el principio la ASEAN ha ofrecido asistencia a Myanmar”, dijo Marsudi.
Con información de Reuters, EFE y AFP