El ministro de Defensa de Brasil, Fernando Azevedo e Silva, aseguró este viernes en Río de Janeiro que la situación en Venezuela es «un problema que debe ser acompañado con atención» y dijo que Brasil debe enfrentar el tema bajo los principios constitucionales de la «no intervención».
Las declaraciones del ministro se dieron durante la XVI Conferencia de Seguridad Internacional del fuerte de Copacabana, donde Azevedo hizo un llamado para que Venezuela consiga una solución pacífica.
Durante su intervención, el ministro fue enfático al afirmar que Brasil debe abordar el problema de Venezuela «bajo los preceptos de la constitución política de respeto a los derechos humanos, el principio de no intervención y la solución pacífica» de los conflictos.
De acuerdo con Azevedo, la crisis económica, política y social que atraviesa Venezuela ha causado principalmente una problemática migratoria hacia Brasil, que diariamente recibe entre 500 y 700 personas del país vecino por la frontera.
En este sentido, el ministro destacó las acciones que ha efectuado el Gobierno brasileño para ayudar a los venezolanos que han llegado al gigante suramericano, especialmente a través del programa «Operación Acogida».
El proyecto, iniciado hace unos dos años por el Ejecutivo del entonces presidente Michel Temer, ha facilitado el ingreso de unos 20.000 venezolanos y ayudado en su integración en territorio brasileño.
Según Azevedo, el «Operación Acogida» ha sido aplaudido por organismos multilaterales, entre ellos las Naciones Unidas.
Sin embargo, en las últimas horas, el programa ha sido objeto de críticas por acusaciones de una supuesta sobrefacturación que pone en duda la transparencia de su gestión.
Al ser cuestionado sobre el tema, el ministro solo dijo que se van a revisar los hechos.
La llegada masiva de venezolanos a Brasil comenzó a finales de 2017.
Desde entonces, según datos del Gobierno, unos 100.000 venezolanos han ingresado a territorio brasileño por Pacaraima, un fronterizo municipio del estado de Roraima y que se ha convertido en los últimos años en la puerta de entrada de quienes huyen de la crisis que se vive en la nación petrolera.
Brasil es uno de los cerca de 50 países que reconoce como presidente legítimo e interino de Venezuela al jefe de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, y que condena, además, al Gobierno de Nicolás Maduro, al que califica abiertamente de «dictadura». EFE