Gentry Beach y Wadie Habboush fueron los empresarios estadounidenses que mediaron para que el Gobierno de EEUU levante las sanciones que tiene contra funcionarios de Venezuela.
Beach es un licenciado en Economía, egresado de The Wharton School, University of Pennsylvania. En su cuenta en Twitter, el originario de Texas, dice ser “amante de la libertad”. Además, era dueño del fondo de inversiones energéticas Vollero Beach Capital Partners, el cual a finales de 2016 fue tomado por Citadel, uno de los principales fondos de cobertura del mundo.
Según información publicada por Nasdaq, alrededor de 50% de las inversiones de Vollero Beach Capital Partners han sido compañías de petróleo y gas.
Por su parte, Wadie Habboush, es un inversionista iraquí-americano, que dirige el Grupo Habboush, especializado en inversiones de energía e infraestructura. Habboush fue trabajador de la Exxon Mobil Anteriormente en su carrera, Habboush trabajó en Exxon Mobil, una de las tantas transnacionales que extraía petróleo en Venezuela y que después de un decreto de nacionalización firmado por Hugo Chávez la llevó a una intensa polémica con el país petrolero al que le exigió una compensación de USD 10.000 millones, pero un tribunal de arbitraje internacional ordenó fue el pago de USD 1.600 millones.
Según documentos de la Comisión Electoral Federal, el padre de Wadie donó más de USD 33.000 dólares en enero de este año al Comité Nacional Republicano.
El medio MIC reveló que dichos hombres tienen una conexión con el hijo mayor del presidente Donald Trump, pero que Beach es su amigo cercano, tanto así que fue uno de los mayores recaudadores de fondos en la campaña del magnate.
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