En días recientes en la ciudad norteamericana de Houston, en Texas, se celebró la fastuosa fiesta de quince años de Verónica Gravina, hija de Eliezer Gravina Muñoz, uno de los tres ex funcionarios de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) que sedeclaró culpable de cargos ante el Departamento de Justicia de Estados Unidosrelacionados con un esquema de soborno ejecutado para ganar contratos energéticos.
El sarao fue por todo lo alto, con una escenografía digna de las mejores producciones de la industria hollywoodense, acróbatas, cuerpos coreográficos, bandas de salsa y hasta agrupaciones de samba y tambor. Por supuesto, como en toda fiesta venezolana que se precie, tampoco habrán faltado los vernáculos tequeños.
Pero, para que abundar en comentarios, las imágenes dicen más… ¡Mátese por su vista!